Son años de trabajo basados en la auto gestión los que ha liderado Antonio Becerro, artista visual y director del Centro Cultural La Perrera. Espacio ubicado en el Parque Los Reyes, que recibe su nombre porque en los años 50 y 60, se transformó en la Perrera Municipal y fue destinado al encierro y sacrificio de los perros vagos de la ciudad.
Desde su apertura en 1995, se ha posicionado como uno de los lugares en donde el arte experimental tiene protagonismo, y en esa línea se ha enfocado en todo tipo de manifestaciones, ya sea ligado a la música, las artes visuales y la danza.
Es por esto que desde el 22, hasta el 25 de enero de 2015 se podrá ver y ser parte del deambulatorio coreográfico “El Testigo” del francés Claude Brumachon y su asistente Benjamin Lamarche. La obra creada en 2001 en Praga recrea el universo del escritor austrohúngaro Franz Kafka.
Los festejos por los 20 años de funcionamiento continuarán en marzo, siendo el teatro su protagonista y en abril la música. En ese sentido, para el gestor cultural, la intensión está en relucir los hitos que han pasado por La Perrera.
Es por ello que el director afirma que “El Testigo” es una obra que coincide con la historia del centro y hace partícipe al público. “Qué mejor que Kafka para celebrar, que tiene que ver con la metamorfosis y el cambio, entonces fue bienvenida por ese lado, ya que nosotros hemos tenido una situación kafkiana desde que nos hicimos cargo de La Perrera. Todos estos azares y coincidencias poéticas no son menores, y Brumachon es un personaje que le exige al máximo a sus bailarines y hace que ésto sea digerible de manera muy simple por el público”, señala.
La obra en sus funciones anteriores, llenó la sala por lo que las expectativas son igualmente altas. Con una capacidad para 70 personas, la experiencia se presenta como un viaje, tanto visual como sonoro que no deja a nadie indiferente de lo que se está revelando.
En ese sentido, el enfoque que tiene el centro cultural responde a los lineamientos basados en la vivencia al interior de sus salas. “La idea es siempre venir a ver algo distinto, como antes, cuando no existían los grandes centros culturales. Nosotros hacíamos un ejercicio exigente, ahora estamos más selectivos y estamos potenciando el perfil experimental y profesional”, agrega Becerro.
Respecto de los 20 años de La Perrera, el artista visual indica que el rol que han asumido los ha hecho ver cómo la cultura no está vinculada a las verdaderas necesidades, por lo que su visión es pesimista.
“El arte en este minuto está en la UTI, y eso pasa también con la cultura en general. No se está haciendo lo correcto, no se lee el presente, no se trabaja con las bases, no se va para donde se tiene que ir. Entonces hay una soberbia de los personajes que siempre son designados por lobistas y articuladores. Es cosa de ver a los ministros de Cultura que han sido completamente nefastos en su gestión”, afirma.
El Centro Cultural La Perrera comienza su año con el reestreno de la obra “El Testigo”, que se podrá ver desde el 22 al 25 de enero a las 20.30 horas. El valor de la entrada está a 3.500. Más información en el siguiente link.