El Festival Internacional de Cine de Iquique (FICIQQ) nació por la inquietud de realizadores jóvenes, oriundos de la Región de Tarapacá, de llevar el cine a una zona extrema con la idea de contribuir a la descentralización. Desde ese momento se han realizado numerosas versiones, siendo la de este año la séptima.

Para el equipo organizador, en esta oportunidad, hay un tinte diferente ya que se lleva a cabo gracias a la adjudicación del Fondo de Fomento Audiovisual 2015, con el cual han podido gestionar un mayor número de actividades, aspecto que destacó la realizadora y directora artística, Katherina Harder.

“Todas las actividades son gratuitas, tanto la exhibición de las películas como los talleres y charlas, porque queremos impulsar el área de la formación, de hecho queremos formar industria y audiencia, entonces en ese sentido toda la gente, que tiene una inquietud y no tiene estudios previos tiene cabida. También hay realizadores jóvenes autodidactas en la región y siento que potenciar sus capacidades es muy importante ya que influye cómo una ciudad, a través del cine, se puede convertir en un foco de convergencia de realizadores de la zona norte”, señala.

A ello agregó que si bien hay un cambio en las políticas culturales, es importante dejar de lado la concursabilidad que año a año generan inestabilidad en los proyectos.

“Siempre nos estamos cuestionando si vamos a poder seguir o no, sobre todo pensando en el año siguiente. Los eventos culturales penden de un hilo y creo que es más difícil mantener en el tiempo los eventos culturales que llevarlos a cabo. Es importante que las regiones potencien la cultura, es más, creo que sobre todo en las regiones extremas las autoridades de los gobiernos regionales deben ser partícipes. Recibimos apoyo del gobierno central, pero no contamos con apoyo regional. Ojalá que esto cambie, es importante impartir políticas culturales desde la región misma”, afirma.

Respecto de la muestra, ésta incluye 30 cintas, provenientes de Argentina, España, Dinamarca, Francia y Chile, en donde el criterio curatorial fue el cine independiente, con una historia bien narrada, que tenga algo que contar, agregó la cineasta.

El festival comienza el nueve de febrero a las 21 horas en el Salón de Tarapacá, donde se exhibirá por primera vez, en la ciudad, la película Santiago Violenta dirigida por el chileno Ernesto Silva. Para el actor y protagonista Matías Oviedo, la película logra acercarse al público al ser representativa.

“Los tres personajes son cercanos y creo que cualquier persona va a empatizar con sus historias, más allá de donde ocurren los hechos. Nos parece relevante abrir el festival con esta película, porque es bueno para los espectadores y para la industria”, afirma.

La competencia se condensa en cinco categorías, que incluye Largometraje Internacional, en donde destaca el estreno mundial de Año cero, del español Mario Jara Pinto;  La voz en off, del chileno Cristián Jiménez; El Aire, del argentino Santiago Guidi. Además de la presentación de las tres cintas nacionales: Los días iguales, El aire y O primeiro verao.

Mientras que en la competencia nacional se presentan las películas estrenadas en 2014 No soy Lorena, de Isidora Marras; Desastres naturales, de Bernardo Quesney; y La visita de Mauricio López, entre otras.

Las demás secciones en competencia son Categoría Cine I, que agrupa a películas de género e independientes, Cortometraje Internacional Ficción y Cortometraje Internacional Documental. Más la sección Ventana al cine chino, donde se podrán ver las cintas El gran maestro, del realizador Wong Kar-Wai.

A ello se suman las actividades organizadas por el Consejo Nacional de Televisión, que incluye dos producciones, más cine infantil a cargo de Novasur; talleres de actuación cinematográfica, la masterclass del director del Festival Chilemonos, Erwin Gómez, y la exposición de “Terror en los programas infantiles” a cargo de Teresa Salinas, Eduardo Salinas y Jorge Olguín, quienes comentarán junto al público la serie animada Cuenta la leyenda, la cual se alza como primera serie chilena de terror animada.

Para el cineasta Jorge Olguín, quien además cierra el festival con la primera película de ficción rodada en 3D y premiada internacionalmente, Gritos del Bosque la instancia genera un espacio importante para la industria nacional.

“Creo que los cineastas, los productores y los que nos dedicamos a esto necesitamos una ventana para llegar al público, no sólo de manera comercial sino que también para generar un diálogo para seguir creciendo y seguir produciendo. Para nosotros este espacio es vital, más aun siendo que pasa en región. Lo que me tiene más fascinado es que se pueden mostrar obras donde el cine comercial nos trunca la exhibición”, indica.

El programa incluye Ventana Internacional, donde se podrán ver películas como Grand Central, de Francia, que formó parte del Festival de Cannes 2013, junto a la alemana Via Crucis, premiada en el Festival de Cine de Berlín el año pasado.

Asimismo, estará disponible el ciclo “El Santo”, dedicado al gran héroe de acción del cine mexicano, y un homenaje a la labor de la Cineteca de la Universidad de Chile, quien proyectará una serie de filmes nacionales de carácter patrimonial.

El Festival Internacional de Cine de Iquique, Ficiqq, se realiza desde el 9 al 13 de febrero, con sedes en el Salón Tarapacá, el Teatro Estibadores y la Casa de la Cultura. Todas las actividades son gratuitas y están disponibles en el sitio web del evento.