Varios focos de fuego siguen alarmando a la población y las autoridades de la región del Biobío. El sol, las buenas condiciones climáticas y la sequía arrastrada desde hace varios meses no han ayudado en la contención de los incendios que siguen arrasando miles de hectáreas y amenazan a las viviendas aledañas.
El siniestro del sector de Colico ha afectado a las comunas de Curanilahue y Arauco. El fuego que comenzó el martes no ha podido ser controlado y ya lleva cerca de 4 mil hectáreas quemadas y hay casas en riesgo.
Según lo explicado por el intendente (s) Enrique Inostroza, el fuego ha ocasionado cortes de ruta y de energía eléctrica. El mayor problema es que las ocho casas que se encuentran en medio del bosque están en situación de peligro.
En la información entregada por la autoridad se registraron otros 17 incendios forestales en la Región, siendo ocho de éstos controlados. Recordemos que desde este miércoles la zona se encuentra bajo Alerta Roja para disponer de los recursos necesarios para combatir el fuego.