Un grupo de yihadistas somalíes tomaron por asalto este jueves una universidad de Garissa, situada a 150 kilómetros de Somalia, dejando al menos 147 muertos y 79 heridos.
El ataque, que se transformó en una toma de rehenes que duró 12 horas, culminó con el asalto de las fuerzas del orden, que abatieron a cuatro atacantes, informó el ministro del Interior.
Los combatientes islamistas penetraron en el complejo universitario a las cinco y media de la mañana, en momentos en que cientos de estudiantes dormían o rezaban la primera plegaria del día.
Los atacantes empezaron a disparar a mansalva y se apoderaron de varios edificios de esta universidad que acoge a unos 800 estudiantes.
“Nos despertamos por los sonidos de las balas (…) nadie sabía lo que estaba pasando, las mujeres gritaban y la gente corría para salvar su vida”, relató Ungama John, un estudiante de la residencia.
El ataque fue reivindicado por un portavoz de los shebab, Sheij Ali Mohamud Rage, que alegó que “Kenia está en guerra con Somalia” por haber intervenido militarmente en este país contra bases islamistas.
Según el portavoz, los asaltantes “soltaron a algunos, los musulmanes, y ellos alertaron al gobierno”. “A los otros los tenemos de rehenes”, añadió, precisando que los retenidos eran cristianos.
Al final del ataque, cuatro atacantes activaron los cinturones de explosivos que llevaban puestos.
Esta región, que linda con Somalia a través de una frontera porosa de unos 700 kilómetros., suele ser blanco de ofensivas islamistas.
El ataque del jueves es el más grave desde 1998, cuando la embajada norteamericana en Nairobi fue blanco de un atentado.
Quiénes son Al Shabab
El de este jueves, no es el primer ataque de la milicia islamista en Kenia, que en 2011 envió a fuerzas de su ejército a Somalia para hacer retroceder la milicia somalí, debido a una oleada de secuestros en suelo keniata atribuídos a Al Shabab, vinculada a Al Qaeda.
Las represalias se suceden desde entonces. Con un perfil cada vez más notorio, Al Shabab ha pasado a ser una de las organizaciones extremistas islámicas más activas. Su nombre significa “los jóvenes” y aunque sus orígenes son difusos, uno de los primeros registros que se tiene de su existencia es su condición de brazo armado del Consejo islámico de tribunales somalíes que se apoderó de gran parte del sur de Somalía en la segunda mitad de 2006.
Fue en septiembre de 2013 cuando militantes de Al Shabab ingresaron fuertemente armados al centro comercial Westgate en Nairobi lanzando granadas y disparando. Tras días de enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, 61 civiles murieron y decenas resultaron heridos.
Al año siguiente, en 2014, la milicia islamista declaró todo el territorio keniata como “zona de guerra”.
En las zonas controladas por al Shabab en Somalia, fundamentalmente del ámbito rural, se ha impuesto la estricta ley islámica o Sharia, y se han producido ejecuciones públicas, amputaciones y lapidaciones.
Al Shabab también utiliza redes sociales con fines de reclutamiento y para diseminar información sobre las actividades del grupo.