El 3 de octubre de 2014 distintos representantes del teatro se reunieron junto a la Ex Ministra de Cultura, Claudia Barattini, para presentar el primer borrador de la Ley de Artes Escénicas. El documento, que incluía una serie de puntos sobre cómo mejorar y fomentar el arte escénico en todo el país, dejaba a la luz una necesidad urgente: mejorar las condiciones de los trabajadores (as) y profesionales de las artes teatrales.
Actualmente, las organizaciones ligadas al teatro han denunciado el eminente cierre de distintos escenarios, lo que por un lado se ha traducido en la disminución de oportunidades de fomento cultural y en un merma en las posibilidades de trabajo.
Por esta razón, el Sindicato de Actores indicó que es necesario aprobar una Ley de Artes Escénicas que no sólo proteja a las personas pertenecientes al gremio, sino que también permita una difusión teatral a nivel nacional.
Según, Andrea Gutiérrez, presidenta del Sindicato de Actores de Chile ( Sidarte) ” es importante promover una ley que le permita a las obras financiarse por medio de diversas alternativas”. En este sentido, indicó que lo que busca esta ley es ” pensar el teatro, la danza y el circo a largo plazo”.
Además, Gutiérrez uno de los puntos débiles dentro de la promoción del teatro tiene que ver con el apoyo estatal a organizaciones independientes, las que según su opinión, muchas veces tienen un carácter público. De acuerdo a esto indicó que ” en los últimos años se ha vivido una gran crisis respecto a la mantención de las salas de teatro ya que no resultan rentables comercialmente, por lo que urge un respaldo y una subvención por parte del Estado de manera sistemática”.
Según Martín Erazo, director de la compañía La Patogallina, “no basta sólo con tener fondos como Fondart. Creemos que es necesario una planificación a largo plazo respecto a la producción, festivales y distribución”, subrayó.
De acuerdo al trabajo que están liderando distintas organizaciones para llevar al Congreso la propuesta, Erazo indicó que “durante un año y medio de trabajo se ha podido ver como diferentes gremios se han unido para desarrollar una propuesta representativa del gremio”, lo que ha llevado a la creación de distintas instancias de discusión de las necesidades del teatro como proyecto educativo.
Actualmente la Ley de Artes Escénicas es promovida por la Plataforma de Artes Escénicas. Dentro de esta organización se encuentran representantes de la Red de Festivales Independientes y la directora del Circo del Mundo, Alejandra Jiménez, entre otras instituciones ligadas al circo, la danza y el teatro.
La Ley que aún no ingresa al Congreso se encuentra en plena etapa de difusión y de presentación y se espera que durante este año se discuta en el parlamento.
Ley de Artes Escénicas
Uno de los puntos fundamentales de la ley tiene que ver con valorar el trabajo de actores y actrices quienes, en opinión de Gutiérrez, “deben dejar de financiar los proyectos culturales”. En este sentido indicó que uno de los puntos relevantes de la propuesta tiene que ver con la creación de un fondo que permita financiar proyectos en el tiempo.
La ley también busca que el Estado promueva el desarrollo regional y la descentralización de las artes, además del fomento a la producción local.
Por otra parte, el proyecto también busca que el Estado promueva la gestión de audiencias y de proyectos educativos.
Otro punto importante de esta ley es que atribuye al Estado la responsabilidad de promover la gestión de audiencias y los proyectos educativos, a la vez que permita la capacitación técnica y la entrega de becas a nivel nacional e internacional.
Respecto a las condiciones laborales la ley propone la creación de un Registro Laboral Nacional de Artes Escénicas Independientes para poder ayudar en el financiamiento de éstas.