“Empieza a escribirse en España el fin del bipartidismo. Cada vez que se abren las urnas crecen nuestros apoyos”. Así, el Podemos anunciaba los resultados alcanzados en las elecciones municipales y regionales celebradas este domingo en España.

En la cita, se elegían 13 de los 17 parlamentos autonómicos. Además, 8 mil 122 alcaldes, incluídos los de Madrid, Barcelona y Valencia, las tres mayores ciudades españolas, dirigidas las dos primeras por el PP y la tercera por los nacionalistas catalanes del Convergencia i Unió (CiU).

Sin embargo, la mayor interrogante que guardaba esta elección era el resultado que iban a alcanzar las nuevas formaciones como el Podemos, liderado por Pablo Iglesias, o su opuesto de centro-derecha, Ciudadanos.

De ese modo, y según los primeros resultados confirmados, en Barcelona, la plataforma ciudadana “Barcelona en Común” inspirada en los “indignados” e integrada por el Podemos, alcanzó 11 concejales, arrebatándole la alcaldía al CiU, representado por Xavier Trias.

Con el 99, 32 por ciento de los votos escrutados, la activista y líder de Barcelona en Común, Ada Colau, celebró la victoria.“Aquí no han ganado unas siglas, aquí no han ganado unos contra otros, ha ganado el deseo del cambio sobre la campaña del miedo, de la resignación y con esto ganamos todos, sobre todo Barcelona”.

En tanto, en Madrid, los conservadores del Partido Popular alcanzaron 21 representantes. Sin embargo, “Ahora Madrid” pacto que incluye al Podemos, obtuvo 20 escaños, por lo que bastaría de una alianza con los socialistas (9 concejales), para lograr la alcaldía.

Esperanza Aguirre, candidata conservadora al municipio de Madrid, dejó entrever la posibilidad de que pese a haber obtenido un concejal más que Ahora Madrid, podrían perder el liderazgo de la ciudad. “Tendríamos la alcaldía siempre que no haya un pacto entre otros partidos”, dijo la noche del domingo.

Si bien, las dos principales fuerzas políticas en España (PP y socialistas), mantuvieron las más altas votaciones del país, con un 27,02 por ciento de los sufragios y 22 mil 659 concejales y un 25,05 por ciento de votos y 20 mil 754 ediles respectivamente, las nuevas fuerzas alcanzaron importantes triunfos y pese a que Pablo Iglesias reconoció que esperaban que el desgaste de los partidos tradicionales hubiera sido más rápido, la nueva conformación podría ser el fin del bipartidismo que ha gobernado al país alternadamente desde 1982.