Durante horas de esta mañana, el Gobierno realizó un positivo balance de la jornada de ayer, donde se realizó un “Censo abreviado”, que tenía por objetivo corregir los errores de forma y fondo del Censo anterior, realizado en 2012 bajo el gobierno de Sebastian Piñera. En 2013 el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), reconoció los problemas y se formó una comisión que recomendó esta modalidad abreviada, es decir, un Censo más corto y con menos recursos, considerando que ya se habían invertido una gran cantidad de ellos en el proceso anterior.
En ese contexto, este Censo lo que hizo fue ajustar las proyecciones de población y obtener información sobre algunas características sociodemográficas de las personas.
“Soy una convencida de que esto es muy bueno porque las estadísticas nacionales son un patrimonio común y es bueno que podamos acceder a ellas y que todos las conozcamos. Creo que este Censo es un triunfo de todos quienes habitan en nuestra patria”, afirmó la Presidenta Michelle Bachelet.
Más allá de las cifras
Pese a la positiva evaluación realizada por el Gobierno, hubo aspectos críticos que marcaron la jornada de ayer. En este sentido, destacaron la escasez de supervisores, la falta de locomoción para llegar a lugares aislados e incluso se registraron ataques a los censistas, algunos de los cuáles fueron mordidos por perros, asaltados y atacados sexualmente.
Por otra parte, en la Comunidad Autónoma de Temucuicui, el Censo fue aplazado debido a la negación de la comunidad de dejar ingresar a los cencistas al territorio.
El werkén de la Comunidad, Jorge Huenchullán, explicó que no estaban dispuestos a participar del proceso debido que “la única forma de hablar de igual a igual con el pueblo Mapuche es cuando estén los problemas del territorio sobre la mesa”.
La decisión de aplazar el Censo en la zona durante la jornada del miércoles, fue informada por el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, quien sostuvo que será el INE quien decidirá si amplía el proceso en dicho lugar.
Otro punto conflictivo se vivió en la comuna de La Reina donde un grupo de pobladores del Conjunto Habitacional Las Perdices decidió protestar y no permitir el ingreso de censistas debido a que el lugar se encuentra hace dos meses sin agua potable.
Respecto a estos casos, particularmente a lo ocurrido en Temucuicui, el ministro de Economía Luis Felipe Céspedes los calificó como hechos aislados.
“Vamos a trabajar por la recuperación de la cobertura en los distintos lugares donde corresponde y creo que, en términos generales, nosotros tuvimos a los largo del país un despliegue de más de medio millón de censistas y las situaciones que enfrentamos son puntuales. Creo que de lo que habla es de una capacidad como país que tuvimos, de trabajar en conjunto por obtener esta información, por llevar adelante de manera adecuada este tremendo operativo”, afirmó el ministro.
Si bien se sabe que hay muchas personas que no fueron censadas, no existe hasta el momento ninguna cifra oficial respecto al alcance de la medición.
En relación a los hogares que no fueron censados, se barajan dos hipótesis. La primera tiene que ver con censistas que no llegaron a los lugares asignados para encuestar, y la segunda con que de haber llegado, la forma de organizarlos superó la capacidad del Estado.
Minorías y otras inclusiones
Otro aspecto llamativo del Censo, fue la falta de inclusión de minorías y personas con situaciones relevantes, como quienes sufren de discapacidades, problemas graves de salud como alergias alimentarias y también quienes pertenecen a comunidades raciales no presentes en la evaluación.
Felipe Guerra, abogado del Observatorio Ciudadano, denunció la exclusión del proceso de ciudadanos afrodescendientes en Chile.
“A pesar de haber sido requerido por las organizaciones afrodescendientes de Arica, el INE se negó categóricamente a incorporar dentro de esta medición estadística la pregunta sobre pertenencia étnica la categoría afrodescendiente, generándose una situación de discriminación de la población chilena afrodescendientes”, señaló.
Por su parte, la Fundación Nacional de Discapacitados a través de un comunicado señaló que “la ausencia deliberada de preguntas para detectar población de Personas con Discapacidad en el Censo 2017 es claramente un hecho atentatorio para un grupo que en nuestro país suma al menos el 20 por ciento de la población. Tres millones de niños, jóvenes y adultos con derechos protegidos a nivel internacional”.
Al respecto Marcela Ferrer, socióloga y académica de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, hizo énfasis en que hay que recordar que ayer estuvimos en una jornada de Censo abreviado.
“De lo que se trata es ajustar lo que son las proyecciones de población y tener alguna información sobre algunas características sociodemográficas. Ahora, evidentemente, cada uno tiene ciertos temas de interés, por ejemplo todo el tema de las discapacidad que es algo muy importante que se ha relegado, pero también hay que recordar que hay encuestas de discapacidad y que vamos a tener un Censo completo en 5 años más, entonces ahí va a ser el momento de incorporar esos otros temas, el tema de las uniones del mismo sexo también era un tema interesante”, sostuvo.
Censo de hecho, Censo de derecho
En Chile existe una tradición de “Censo de hecho” que quiere decir, básicamente, que las personas se censan en el lugar donde durmieron la noche anterior, con aplicación en un día feriado, con periodo de extensión para zonas que no fueron cubiertas.
En este sentido, se ha observado una tendencia, en América Latina y en los países del primer mundo, a Censos de derecho, es decir a censos que se extienden en un periodo de tiempo, lo que fue la idea del censo del 2012. Esto tiene un menor costo e implica tener censistas capacitados.
“El transito de un censo de hecho a uno de derecho, implica mucha preparación, y uno de los problemas del Censo del año pasado fue precisamente que no se tomo el tiempo necesario para hacer un cambio de tal magnitud, Entonces si eso se hiciera, programado en el tiempo, puede ser una alternativa eficiente para Chile”, explica Marcela Ferrer.
Los resultados de la medición se espera que estén para diciembre de este año y que arrojen una serie de datos que aporten información que sirva de marco conceptual para futuras encuestas e investigaciones.
Por lo demás, se espera que dentro de 5 años se realice un Censo completo, que incluya muchos más datos de los que contempló esta medición.