Este martes comenzaron los careos entre el ex Comandante en Jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, y diez ex presos políticos. Las diligencias se están realizando en las dependencias de la Policía de Investigaciones (PDI) de La Serena y es posible que se extiendan hasta el día jueves.
El ministro en visita Vicente Hormazábal, quien se encuentra a cargo del caso, explicó que Cheyre es acusado por torturas cometidas al interior del Regimiento Arica de La Serena y en la Comisaría de Ovalle entre los meses de septiembre y octubre del año 1973.
Este proceso se suma al careo realizado en mayo entre el ex uniformado y Nicolás Barrantes, uno de los principales denunciantes, quien acusó a Cheyre de ser responsable de las torturas que recibió en el regimiento de La Serena luego del golpe de Estado.
Nicolás es hermano de Marcos Barrantes, uno se los asesinados en la Caravana de la Muerte, por lo que estas denuncian se suman también a esta causa, en la cual el ex general es señalado como presunto cómplice en los 15 homicidios realizados contra opositores a la dictadura cívico militar en La Serena.
Cristian Cruz, abogado querellante del caso, indicó que esta es una diligencia judicial en la que los testimonios de ambas partes serán confrontados para contribuir como un medio de prueba a la investigación que realiza el ministro Homazábal, para que el tribunal las considere en su resolución.
“Juan Emilio Cheyre deberá ser confrontado con varios ex presos políticos, hombres y mujeres, que lo sindican y reconocen inequívocamente como autor de las torturas que ellos sufrieron al interior del Regimiento de La Serena. La instancia se desarrollará sin perjuicio que el ministro pueda interrogar a las partes por separado”, señaló.
Respecto del testimonio de su representado Nicolás Barrantes, el abogado sostuvo que su versión ya se encuentra prácticamente afirmada. En ese sentido, explicó que en estos nuevos careos no se espera confirmar ninguna declaración previa, pues cada uno de los asistentes es una víctima por sí misma que reconoce la participación de Juan Emilio Cheyre en sus torturas.
Según el jurista, hay pruebas suficientes que corroboran las acusaciones contra el ex uniformado. De este modo, insistió en que para la memoria del país es muy importante que estos crímenes no queden impunes, asegurando que no existen dobles lecturas sobre estas denuncias.
“No solo son ofensivos los delitos perpetrados, sino también que distintas autoridades y ex autoridades defiendan desde el poder al victimario, menospreciando a las víctimas y su dolor. Se protege a una persona solo por haber ocupado un cargo o una autoridad, como si ese hecho lo debiese eximir de responsabilidad penal o de responder ante los tribunales como el resto de los chilenos”, enfatizó.
De acuerdo a lo informado por el Diario El Día, este proceso comenzó este martes con cuatro testigos, continuará mañana con otros dos y finalizará el jueves con los últimos cuatro.
Por su parte, en una entrevista conferida en junio al mismo medio, Juan Emilio Cheyre manifestó no haber cometido ningún delito y poseer una carrera militar intachable.