En fallo unánime, la Corte Suprema declaró procedente solicitar a Estados Unidos la extradición del ex oficial del Ejército Armando Fernández Larios, procesado en Chile por delitos de secuestro agravado y homicidio calificado de Manuel Sanhueza Mellado. Los crímenes se cometieron en Pisagua, a partir de 1974.
La Segunda Sala del máximo tribunal –integrada por los ministros Milton Juica, Carlos Künsemüller, Lamberto Cisternas, Manuel Antonio Valderrama y Jorge Dahm– respondió a la solicitud del ministro en visita Mario Carroza, luego de establecer que se cumplieran los requisitos para la extradición del militar en retiro.
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El fallo señala que: “los múltiples antecedentes consignados por el tribunal instructor permiten tener por establecidas las condiciones exigidas por el artículo 274 del Código de Procedimiento Penal y en especial presunciones suficientes para afirmar que al requerido le cupo participación en los hechos investigados en la causa”.
El documento detalla que: “los ilícitos se encuentran sancionados con la pena de presidio mayor en cualquiera de sus grados, en el caso del secuestro agravado, y con presidio mayor en su grado medio a presidio perpetuo, en el caso del homicidio calificado”.
Cabe destacar que en el fallo se indica que “se tratan de delitos comunes, no políticos ni conexos con uno de ellos, no son delitos militares ni contra la religión, y a cuyo respecto la acción penal no está prescrita“.
Manuel Sanhueza Mellado, era militante de las Juventudes Comunistas y fue detenido el 10 de julio de 1974, por civiles que ingresaron a su domicilio en la Población “Venceremos” de Arica. Los agentes se identificaron como miembros del Servicio de Inteligencia Militar.
Mellado fue apresado en compañía de su cónyuge, Cecilia Linoska Rojas Orellana y ambos fueron trasladados en un jeep al Regimiento “Rancagua” de Arica.
Luego, su suegro Orlando Rojas y Raúl Patricio Poblete, fueron sacados juntos del regimiento y trasladados a Pisagua bajo la vigilancia de la patrulla de militares al mando de un oficial en el que los testigos creen reconocer a Fernández Larios.