El 8 de enero de este año la aerolínea Latin American Wings (LAW), de origen nacional y dedicada a los viajes low cost, anunciaba su retiro del mercado de los vuelos nacionales. La compañía explicaba que “la tendencia actual del mercado hace insostenible el modelo de negocio que deseábamos implementar en un principio y, producto de lo expresado, hemos decido volver a nuestras raíces con el objetivo de no perder el foco inicial, dedicándonos a consolidar nuestras rutas internacionales”.
Lo que en ese momento alimentaba las especulaciones sobre una posible improvisación en la estrategia comercial, en marzo volvió a verse reforzado. El 9 de ese mes la empresa anunciaba la suspensión temporal de todos sus vuelos y un proceso de reorganización, y el 12, la Dirección General de Aeronáutica Civil comunicaba en una declaración pública que suspendía el Certificado de Operador de Aéreo a LAW. En un comunicado firmado por el gerente general de la firma, Andrés Dulcinelli, se señalaba que “la guerra de precios, impuesta por las grandes empresas de la industria aeronáutica, provocó que al interior de la compañía se inicie un proceso de reorganización que considera el ingreso de nuevos capitales”.
“Recocemos que ésta medida tendrá efectos sobre algunos de nuestros pasajeros y lamentamos profundamente los inconvenientes que se generarán”, afirmó el representante de la aerolínea en la carta.
El anuncio se hizo una semana después de que LAW tuviese que suspender sus operaciones en Perú debido al incumplimiento de los itinerarios de vuelo de parte de la empresa. Esto se suma al episodio que en febrero tuvieron que vivir 34 turistas chilenos en República Dominicana, quienes esperaron por cinco días que la compañía reprogramara sus vuelos suspendidos.
La aerolínea también anunciaba a inicios de marzo la decisión de “suspender temporalmente sus vuelos en la ruta Puerto Príncipe, Haití, debido al exponencial aumento de ciudadanos haitianos que han sido declarados inadmisibles por las autoridades, para ingresar a Chile a través del Aeropuerto Arturo Merino Benítez”.
Según Carl Abilhomme, vocero de la comunidad haitiana en Chile, la firma ha usufructuado de forma indiscriminada con los viajes entre Santiago y Puerto Príncipe: “Law operaba de una forma en Haití que no era la más regular. Ellos saben muy bien que los chiquillos que venían no venían a turistear. No son líderes o empresarios que van viajando, es pueblo. Como la ley lo dice, tú no puedes viajar a un país del que no eres residente sin tener un boleto de avión de ida y vuelta. Entonces ellos, cuando vendían un boleto, se aseguraban la vuelta sin tener pasajeros. Ganan el doble. Por eso les gusta hacer viajes de Haití a Chile, porque saben que, si hay 150 personas, apenas 5 o 10 van a volver, entonces son 140 boletos que ganas. Y no se puede comprar el pasaje de solo ida, porque tendrías que mostrar que eres residente chileno”.
La comunidad haitiana ha reclamado insistentemente en contra de la aerolínea. Así lo asegura Abilhomme, quien además señala que LAW les ha solicitado cooperación para resolver problemas logísticos: “Hay reclamos de vuelos, de plata, de maletas. Law nos pidió ayuda a nosotros, pero nosotros no somos una fundación, somos una página; no tenemos la logística para almacenar maletas, hacer filas, llamar gente. Sería muy complicado, y además estaríamos haciéndole un favor a LAW”.
Esto, en paralelo a la nueva ley de migraciones que ha impulsado el gobierno, y que obliga a los ciudadanos haitianos a ingresar al país tanto con una visa de turista como para hacerlo como residente temporal. Aún queda espacio para la incertidumbre con respecto a una ley que la comunidad haitiana ha calificado de “discriminatoria”: “A mis haitianos: Los que llegaron desde el 8 de abril para atrás, tienen hasta 90 días para mostrarse y dar la cara en extranjería, para recibir una regularización. Eso, si es que tienen los papeles limpios, y yo tengo fe en que mis haitianos son sanos en ese sentido. Al gobierno, por favor, que siga con aclarar todo. Una visa humanitaria, ¿qué significa? ¿Qué pasa después de los 12 meses? Esta persona puede postular a la visa definitiva ¿o qué pasará?”.
La situación de LAW es compleja. La plana ejecutiva de la compañía decidió, según Pulso, remover al gerente general de la firma, Andrés Dulcinelli. En su reemplazo dejarán a Bernardo Javalquinto, “ex economista del Banco Mundial dedicado a asesorar a empresas en situación de crisis financiera”.