Tras el recrudecimiento de la violencia en las últimas horas, en las que dos estudiantes murieron alcanzados por las balas de fuerzas progubernamentales, la Conferencia Episcopal de Nicaragua publicó un mensaje, difundido también en las redes sociales, con el fin de condenar la falta de voluntad del Gobierno de Daniel Ortega para “dialogar sinceramente y buscar procesos reales para buscar la democracia”.
En el mensaje pastoral, los miembros de la Iglesia nicaragüense, mediadora en las conversaciones entre la sociedad civil y el gobierno sandinista, exigen a este último, una vez más, comprometerse con los puntos abordados en la agenda de democratización, tema central del diálogo, y a desmantelar sus “elementos armados”, en referencia a los policías y militares que atacan regularmente a la población desde el inicio de la crisis sociopolítica el pasado 18 de abril. “Hoy como nunca, los Derechos Humanos están siendo violentados en Nicaragua” se lee en la misiva.
Mensaje Pastoral de la Conferencia Episcopal de Nicaragua, publicado hoy 14 de julio de 2018. pic.twitter.com/qHizEeX0HM
— Silvio José Báez (@silviojbaez) 15 de julio de 2018
Asimismo, los obispos instaron al Gobierno a cumplir con las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), emitidas tras una segunda semana de observación en el terreno.
Sin embargo, la presión de la CIDH parece no ser suficiente para frenar los ataques. Antonia Urrejola Noguera, Comisionada de la CIDH, exigió al Estado de Nicaragua a garantizar los derechos de su población y llamó a la comunidad internacional a pronunciarse sobre los hechos.
El gobierno español reaccionó este domingo, condenando la violencia en Nicaragua y abogó por “soluciones políticas” a la crisis que vive el país centroamericano. México, Panamá y Costa Rica también denunciaron los ataques violentos.
Nuevo episodio de violencia: ataques a campesinos
Pese a las exigencias de la Iglesia y de los organismos internacionales, la represión del Gobierno no cesa. El Secretario Ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrāo, anunció en su cuenta de Twitter en la madrugada del domingo que su organismo fue advertido de ataques a campesinos en varios puntos del país.
Policías y paramilitares atacaron a manifestantes que bloqueaban una carretera en Lóvago, en el departamento de Chontales. La dirigente campesina Francisca Ramírez aseguró que las fuerzas gubernamentales “están persiguiendo casa por casa a todo el pueblo que se solidarizó” con los manifestantes.