Este miércoles, Balmaceda Arte Joven (BAJ) conmemoró los 20 años de su Galería de Artes Visuales, espacio que surgió en 1998 con el fin de promover los proyectos de artistas emergentes y que a la fecha ha presentado más de 200 exposiciones.
Las artistas Ximena Zomosa y Nury González fueron, entonces, las encargadas de dar vida al proyecto que más tarde vio pasar el trabajo de creadores como Voluspa Jarpa, Demian Schopf, Mónica Bengoa, Livia Marín y Pablo Serra, entre muchos otros.
“La galería surgió en un contexto de retorno a la democracia. En esos años todavía había mucha distancia respecto de la búsqueda del arte contemporáneo. Había también pocos espacios que acogieran esa reflexión más rupturista y esa fue la vocación de la Galería, es decir, generar un espacio para explorar e investigar”, comenta Loreto Bravo, directora ejecutiva de BAJ.
” O sea, la Galería se transforma en un espacio de mucha libertad creativa que se va cargando de una responsabilidad social. Esa fue una marca muy importante que luego motivó la realización de laboratorios. Eso ha permitido que se encuentren también artistas consagrados con emergentes”, añade.
Para Loreto Bravo uno de las características principales de la Galería tiene que ver con cómo se ha trabajado el área de creación de audiencias. Esto, según advierte, ha permitido que el trabajo de diferentes artistas emergentes llegue a zonas como Antofagasta, Valparaíso, Concepción y Puerto Montt.
“Hemos hecho trabajos entre estudiantes y artistas docentes. BAJ ha incorporado distintos dispositivos para acercar el arte contemporáneo a los jóvenes o las personas que no tienen familiaridad con esta expresión. Así surge Galería Activa que es un espacio que está en interacción permanente con niños, jóvenes de escuelas y liceos. A través de este programa muchos se enfrentan por primera vez a las expresiones del arte contemporáneo. Algunos conversan por primera vez con artistas”, explica la gestora cultural.
“La Galería también representa esta búsqueda en el sentido del arte como un espacio de transformación no solo para las personas sino que también de transformación social y que pone en diálogo el pensamiento crítico de los artistas con las búsquedas de los jóvenes escolares. Aquí encuentran posibilidades de tener ese diálogo para hacer mejor el mundo de eso se trata”, añade.
Durante el segundo semestre de 2018 la Galería tiene una programación ligada a la migración y a los problemas sociales. En este sentido y, para celebrar los 20 años del espacio, también se exhibirá una instalación de la artista visual Kika Mazry.
Además, se presentará una revisión audiovisual de los creadores que han dado a conocer sus obras en el lugar.
En esta línea, Bravo explica: “La Galería tiene una curatoría anual. El año pasado y este 2018 pusimos el énfasis en el valor de las diferencias, por lo tanto, el foco más preciso va a estar en reflexionar sobre la colonización en América Latina”.
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