Los jóvenes chilenos presentan índices de consumo de marihuana, fármacos tranquilizantes y cocaína en niveles superiores a los de todo el continente, esa es una de las principales conclusiones del 12° Estudio nacional de Drogas en Población Escolar elaborado por Senda.
De acuerdo a la investigación realizada entre octubre y diciembre de 2017 en jóvenes entre 13 y 17 años, uno de cada tres adolescentes declara haber consumido marihuana, mientras que el 64% aseguró haberse embriagado en el último mes.
Según el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol, el consumo entre los jóvenes aumentó en sustancias como marihuana (30,9%), fármacos tranquilizantes (8,6%), tabaco (4,3%) cocaína (3%) y pasta base (1,4%).
Para el director de Senda, Carlos Charme, existe una preocupación por estos resultados que sitúan a Chile en el primer lugar en Latinoamérica por el consumo de estas drogas “tenemos que hacer un llamado serio a que el debate sobre este problema sea sobre la base de argumentos serios y no desde la opinología”, afirmó.
Luego de conocerse los resultados de este estudio, el director de Senda, Carlos Charme, remarcó que el Gobierno no impulsará la legalización de la marihuana, enfatizando que su consumo causa daños en la salud.
Por su parte, Viviana Venegas, neuróloga y presidenta de la Sociedad Chilena de Psiquiatría y Neurología de la Infancia, recalcó que “nuestra preocupación radica en que no es solo el consumo lo que nos afecta sino que también las patologías de salud mental que eso conlleva”.
También se dio a conocer que el consumo de marihuana, tranquilizantes sin receta y pasta base comienza a los 14 años, mientras que la cocaína es a los 15.
Al ser consultados sobre si sus padres estarían molestos si los sorprenden consumiendo marihuana, llegó a un 67 por ciento, debajo del 82 por ciento en 2011, mientras que en el caso del alcohol, los estudiantes dijeron que un 57 por ciento se enojaría.