El Tribunal de Pozo Almonte decretó arraigo nacional para los tres turistas – dos chilenos y una ciudadana belga- que fueron acusados de dañar el geoglifo conocido como el “Gigante de Tarapacá”.
Los imputados, que fueron detenidos el viernes pasado por efectivos de la PDI cuando pretendían tomar un avión hacia Europa, fueron procesados por daños a monumentos nacionales.
Ubicado a unos 100 kilómetros de la ciudad de Iquique, el geoglifo resultó dañado por el ingreso de un vehículo el fin de semana recién pasado.
El “Gigante de Tarapacá” es considerado uno de los geogligos más grandes del mundo. Se encuentra en la comuna de Huara, en la Región de Tarapacá, y posee una altura de 119 metros.