Fueron 33 días de incertidumbre que mantuvieron en vilo a gran parte de la comuna de Lota. Hace 33 días, uno de los principales atractivos de la zona había dejado de funcionar debido a la huelga de sus trabajadores, quienes exigían a la corporación Baldomero Lillo un reajuste del 13 por ciento.

Sin embargo, el conflicto que parecía no tener fin -y que incluso presumió con abarcar a toda la comuna-, fue resuelto durante esta jornada. Un reajuste del 10 por ciento más un bono de 300 mil pesos por el reinicio de las labores fue la propuesta que trajo de vuelta al Chiflón del Diablo.

En conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, Mario Vera, vocero de la corporación Baldomero Lillo, señaló que “esto nos deja muy contentos y genera un gran alivio ante la tensión de las últimas semanas”, y agregó que “ambas partes entendieron que había que ceder. La corporación entendió que debía elevar el porcentaje. Además, el bono de término de conflicto fue un punto importante”.

Se estima que durante la paralización fueron cerca de 12 mil turistas los que no pudieron hacer ingreso a la mina.

Sobre este punto, Vera afirmó que el arreglo es un gran beneficio para la comunidad.

“El circuito es súper importante, no solo del sector patrimonial y turístico, sino que también conlleva todo un encadenamiento colectivo que beneficia a la ciudad, desde los restoranes hasta los artesanos. Entonces para nosotros este es un punto positivo que beneficiará a la economía local”.

Previo al fin de la huelga, los trabajadores exigían un reajuste cercano al 13 por ciento, mientras que la empresa solo ofertaba un 7,8.

De acuerdo a un comunicado emitido por la corporación, el Chiflón del Diablo volverá a operar desde este miércoles.