Fue este martes que el Colegio Médico entregó una propuesta para frenar la pandemia del coronavirus en Chile. Todo esto, ante la preocupante estadística que deja a Chile con la tasa de mortalidad más alta de Latinoamérica.

El plan elaborado por el gremio pone énfasis en dos áreas claves: trazabilidad y confinamiento.

Al respecto, la presidenta del Departamento de Género y Salud del Colegio Médico, Francisca Crispi, explicó a Radio y Diario Universidad de Chile que, en cuanto al confinamiento, se hace necesario clarificar los criterios para confinar y desconfinar.

Pues la dirgenta sostuvo que, hasta el momento, las cuarentenas y la falta de ellas se han decidido sobre discernimientos que no han sido transparentados, por lo que instó a seguir la experiencia internacional y desarrollar distintos tipos de alerta que dependan de criterios epidemiológicos y así decidir sobre cuarentenas y otras medidas.

Francisca Crispi

En cuanto a la otra área clave, Crispi urgió a las autoridades a establecer un plan nacional de trazabilidad pues, a juicio del Colegio Médico, el país debe ser capaz de seguir la huella de la infección.

Para esto, el gremio calculó en más de nueve mil los trazadores requeridos.

“Es muy importante contratar el número de trazadores que necesitamos para esta tarea, tenemos muchos casos activos por lo que necesitamos muchos trazadores, hemos calculado más de nueve mil trazadores en todo Chile, los dineros se tienen que movilizar pronto para poder contratar a todos esos trazadores, también necesitamos un registro de estas tareas en un software apropiado, e indicadores claros de cumplimiento que sean comunicados a la ciudadanía diariamente”.

En cuanto a la formación de estos trazadores, la profesional indicó que no es necesario ser trabajador de la salud para ejercer, pero si pasar por un curso que garantice los conocimientos necesarios.

“Tiene que haberse formado en trazabilidad. Nosotros tenemos un curso en la Escuela de Salud Publica de la Universidad de Chile con otras muchas instituciones asociadas, el cual es un curso de diez horas, que da las herramientas básicas para realizar el ejercicio de trazabilidad. Hemos tenido más de siete mil personas que han completado el curso en estas semanas, ha sido bien masivo. Es importante saber que la trazabilidad no es necesario que la haga un profesional de la salud, los centros de atención primaria de los municipios pueden contratar a personas que no sean profesionales de la salud pero que hagan este ejercicio con supervisión por parte de profesionales de la salud para que puedan guiar en caso de dudas y alarmas”.

Crispi también se refirió a la caída de los índices de contagiados y decesos. Si bien reconoció cierto avance, llamó a no relajarse, pues la situación nacional no ha dejado de ser crítica.

“No hay que apresurarnos, ya tenemos la experiencia en la cual se llamó muy anticipadamente a una nueva normalidad, a un retorno seguro, y ya vimos lo que pasó después, que hubo un aumento masivo e los casos y de las muertes, por ende, hay que actuar en este minuto con extremada cautela, tomando acciones que sean diferenciadas por territorio, en base a criterios epidemiológicos establecidos claros y así evitar riesgos innecesarios, porque estamos en una situación igualmente crítica”.

Además, y justamente por la falta de un plan de trazabilidad, la dirigenta recordó que podemos tener rebrotes aun mayores de los experimentados.