El Presidente Sebastián Piñera se refirió, este viernes, a un nuevo aniversario del golpe de Estado de 1973, mismo que acabara con el sistema democrático e instalara una dictadura milita durante 17 años.
Durante su alocución, el mandatario sostuvo que la historia de esos años debe servir para “aprender las lecciones y enseñanzas de este pasado y permitir que estas puedan guiar e iluminar el camino de todos hacia un camino mejor”.
Además, el jefe de Estado afirmó que el quiebre de la democracia fue “una dura derrota, un gran fracaso”.
Como contraparte, Piñera expresó que la recuperación de la democracia fue “un gran triunfo de todo el país”.
En esa línea, el Presidente resaltó el “valor del diálogo, la colaboracion y los acuerdos entre quienes pensamos distintos para poder resolver los problemas que nos afectan a todos”.
También hubo palabras para el venidero plebiscito del 25 de octubre. Al respecto, aseguró que, desde el Gobierno, “estamos convencidos que la inmensa mayoría de los chilenos queremos perfeccionar, modernizar y cambiar nuestra Constitución”.
Una Carta Fundamental “que recoja y resguarde los principios y tradición democrática de nuestro país, y que incorpore y proteja los derechos fundamentales de todos nuestros ciudadanos”.
En ese sentido, el mandatario llamó a no heredar las divisiones del pasado a las generaciones futuras.
“No tenemos derecho a negarles a nuestros hijos, a nuestros nietos y a las generaciones que vendrán, las mismas divisiones, los mismos odios, los mismos rencores que tanto daño nos causaron en el pasado”.
“Es muy importante hoy, donde apreciamos signos y síntomas de divisiones, de violencia, de intolerancia, de atropellos a la democracia y al Estado de Derecho, recordar que la unidad, la paz, el dialogo, la colaboración y los acuerdos son mas necesarios que nunca”.
“Una casa dividida no puede prevalecer, un país dividido no puede avanzar”, concluyó.