Este miércoles la autoridad reguladora de los medicamentos británica (MHRA por sus sigla en inglés) alertó a los hospitales que se encuentran distribuyendo la vacuna de Pfizer y BioNtech en orden a que eviten inocularla en pacientes que padezcan de alergias severas.

Según lo señalado por Stephen Powis, director nacional médico del NHS, (Servicio Nacional de Salud) dos miembros del personal sanitario sufrieron reacciones anafilactoides tras ser inyectados el martes, aunque ya se encuentran en recuperación.

“Como es común con las vacunas nuevas, la MHRA ha recomendado como medida de precaución que los pacientes con un historial relevante de reacciones alérgicas no reciban la vacuna, después de que dos personas con dicho historial respondieran de modo adverso”.

Desde la farmacéutica, y consultados por BBC, se informó que la advertencia es una medida de precaución mientras se realiza una investigación sobre cada caso y sus causas. Una portavoz de Pfizer explicó a la cadena estatal que su medicamento fue “bien tolerado” durante el ensayo clínico en fase tres, y que el comité independiente de seguimiento no informó de problemas graves de seguridad.

La autoridad reguladora solicitó que todos los centros que estén administrando las vacunas dispongan de  instalaciones adecuadas para atender a los posibles afectados por reacciones luego de la inoculación.