Este martes un grupo de académicos de la Universidad de Chile, liderados por los investigadores Alejandro Jofré, Eduardo Engel y Juan Díaz, presentaron las conclusiones de su estudio de efectividad del programa de vacunación del Gobierno en personas que han recibido una o dos dosis, así como los resultados de las inoculaciones en distintos lapsos.
Así, según las conclusiones obtenidas, quienes han recibido ambas dosis de alguna de las vacunas y de ello ya ha transcurrido 14 días, evidenciaron una efectividad del 56,5 por ciento para prevenir contagios. Luego, quienes ya tienen las dos dosis, pero las obtuvieron hace menos de dos semanas el porcentaje de efectividad baja al 27, 7 por ciento, mientras que quienes solo tienen una dosis alcanzaron solamente un por ciento.
En Chile, actualmente se encuentran en aplicación las vacunas provenientes del laboratorio chino Sinovac y del europeo Pfizer BioNTech, cada una con 93 y un 7 por ciento de inoculación, respectivamente.
Correspondiente a la efectividad de cada compuesto, el académico de nuestra casa de estudios, Eduardo Engel, se refirió a lo que ocurre con la vacuna Coronavac, que demostró aproximadamente un 54 por ciento de efectividad en la prevención de contagios.
“Si se toma literalmente la efectividad que estamos analizando cuando todo el mundo esté vacunado vamos a tener el 46 por ciento de los contagios de los que habríamos tenido sin vacuna. Eso es lo que significa que haya una efectividad del 54 por ciento, pero hay un tema que un estudio como este no puede analizar y es lo que va a ir sucediendo con el nivel general. Todas estas comparaciones son sobre la base del nivel actual de circulación del virus”.
El investigador precisó que la metodología usada en los datos obtenidos los llevó a concluir que el efecto combinado “de las aplicaciones de Sinovac y Pfizer es el 56,5% y, luego tomando la efectividad de Pfizer en Israel, podemos inferir un 54% para la Sinovac”.
Otra de las conclusiones a las que se arribó es que la vacuna de Sinovac demuestra que, o bien en Chile existe una baja circulación de las nuevas variantes del virus como las de Nueva York o Brasil, el compuesto de origen chino mantiene su efectividad ante ellas.
A la vez, Engel explicó que este mismo compuesto demostró ser altamente efectivo en evitar el agravamiento de quienes contraen el virus.
“Los ensayos clínicos indican que todas las vacunas, pero particularmente la de Sinovac, tiene una efectividad mayor en prevenir hospitalizaciones o que los pacientes terminen en UCI. Pero para poder analizar eso en terreno y ver los números de efectividad, se requiere tener acceso a información que desgraciadamente no está disponible por el momento”.
La información a la que alude Eduardo Engel es la cifra de contagiados que se infectaron con el virus ya habiendo recibido al menos una dosis de la vacuna.
Justamente sobre la importancia que conlleva la vacunación fue a la que se refirió el Rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, quien además hizo un llamado a entregar más acceso a la información para los investigadores y expertos.
“Vacunarse disminuye muy significativamente la posibilidad de un contagio; no la elimina pero la disminuye mucho, por lo tanto hay que vacunarse. La primera dosis de la vacuna no tiene después de cuatro semanas ningún efecto relevante, por lo que tanto, seis semanas después de vacunarse para todos los efectos prácticos se está en la misma situación de vulnerabilidad ante un contagio de quien no se hubiera vacunado”, señaló el médico.
“Estar en conocimiento de los datos y poder analizarlos es algo que nos hace muy bien a todos. El poder confrontar la realidad en la cual estamos y es por eso que ha sido tan importante que se liberen los datos del Ministerio de Ciencias y tanto o más importante es enfatizar que si tuviéramos información mayor y más efectiva podríamos desde luego sacar resultados resultados y conclusiones muy relevantes”, agregó el Rector.
De acuerdo con el estudio, los resultados más significativos se pueden observar en las personas mayores de 75 años, con quienes se inició hace más de dos meses la campaña de vacunación masiva del Gobierno. Sin vacunas, los contagios en este rango etario habrían sido un 80 por ciento superior, mientras que en quienes tienen entre 70 y 74 años, se habría producido un nivel de enfermos un 60 por ciento mayor.
Por lo anterior, los académicos que llevaron a cabo el estudio recalcaron la necesidad de inocular a un mayor porcentaje de la población en orden a lograr la inmunidad de rebaño, y llamaron a aumentar los esfuerzos para vacunar a los rezagados y a las personas menores de edad.