Según un informe elaborado por la Cámara Chilena de la Construcción en 2020, el 53% de los departamentos que se ofrecen en Santiago tiene una superficie menor a los 50 m2. Para muchos puede significar un espacio más que suficiente, pero en la situación de pandemia que estamos viviendo el asunto puede cambiar.
Debido a las cuarentenas, muchas personas están pasando más tiempo en casa de lo normal. Algunas incluso, salen menos de casa porque se encuentran teletrabajando. Esto ha provocado que muchos se sientan encerrados en un espacio tan pequeño, en medio de una ciudad cada día más ruidosa y con menos áreas verdes.
“Hasta salir a tomar aire es complejo en Santiago. Hay muchas comunas que tienen pocos parques habilitados, por lo que las personas no tienen otra opción que mantenerse en casa. A pesar de que la idea es que se mantengan allí en pandemia, dentro no tienen mucho espacio de recreación, lo que termina por agobiar a varios”, explica Juan Fonseca Vargas, director de la empresa especializada en terrenos rurales, Mundo Parcelas.
Entonces, ¿cuáles son las condiciones necesarias para vivir sanamente en pandemia? No hay una respuesta absoluta, pero sí varios consensos.
Los chilenos se sienten agobiados
Una reciente encuesta realizada por la Universidad del Desarrollo a personas entre los 12 y 82 años demostró que una gran cantidad de chilenos no se siente a gusto dentro de sus viviendas en pandemia. Por una parte un 7% se catalogó como “hacinado” y un 26% aislado. No obstante, un 52% declaró sentirse “agobiado”, una mezcla de las dos categorías anteriores.
Al grupo de personas que se identifica con esta última opción, les realizaron preguntas relacionadas con los sentimientos de tristeza, ansiedad, incertidumbre y estrés. Individualmente, el grupo de agobiados obtuvo un índice del 60% en cada uno.
Las condiciones de habitabilidad de nuestro país podrían tener una gran responsabilidad en estos resultados, ya que según indica este estudio mientras más personas haya en un hogar, mayor será la sensación de hacinamiento que experimentan las personas, entendiendo esto como el hecho de sentirse invadido por otras personas con las cuales uno no quiere conectarse en un determinado momento.
Menor espacio, más problemas de salud mental
Complementando al estudio anterior, el “Termómetro de la Salud Mental en Chile ACHS-UC: Segunda Ronda”, analizó cuáles son los factores que han incidido sobre la salud mental de los chilenos en pandemia, encontrando una relación directa con el espacio que tienen disponible en casa.
Aquellos que declararon sentirse más deprimidos, con más sueño, menos animados, con problemas de concentración, con mayor agobio y otros problemas de salud, en su mayoría provenían de viviendas con una menor superficie, sin balcón, terraza, patio o jardín.
Por otro lado, aquellos que disponían de menor superficie individual en su hogar también son los que más trastornos presentaban. Un 35,1% tenía 10 m2 destinados para ellos en sus viviendas y un 26,4% de 10 a 20 m2.
¿Cuál es la vivienda ideal?
Lo cierto es que no hay una fórmula que establezca cuántos m2 debe tener una vivienda para garantizar una vida saludable de sus habitantes. Sin embargo, las últimas tendencias indican que las personas están buscando propiedades que, más que poseer una gran superficie habitable, otorguen un entorno que les permita distraerse y pasar el tiempo.
Esto es complejo de lograr en la ciudad, considerando que no en todos las comunas existen espacios abiertos y áreas verdes: “Muchos nos han contactado para cotizar un terreno fuera de Santiago. En la pandemia varios santiaguinos se han dado cuenta de que el lugar en donde viven es muy pequeño, no les permite descansar realmente, jugar con los niños, distraerse de las preocupaciones.”, señalan desde Mundo Parcelas.
Considerando que en un terreno agrícola la superficie de construcción puede llegar hasta los 500 m2 solo en la vivienda principal, lo que representa un 100% de superficie que las viviendas de los chilenos más agobiados, es lógico que esta tendencia se esté dando.