Tras dos años de inactividad la versión 62 del espectáculo musical más esperado del país dará inicio este dimingo 19 de febrero. Antes, durante y después del Festival de Viña del Mar matinales y redes sociales dan espacio a una variedad de críticas respecto al certamen, pero este año los tropiezos de la organización del evento marcaron su antesala. Así, la parrilla musical fue objeto de interpelaciones debido a la cantidad de artistas urbanos dedicados mayormente a satisfacer a un público juvenil.
Luego de una serie de polémicas que marcaron su retorno, el viernes la Ciudad Jardín dio lugar a la Gala del Festival de Viña 2023, también llamada “Noche Cero”, en donde distintas figuras nacionales e internacionales del mundo del espectáculo desfilaron por la alfombra roja desplegada en la Plaza Colombia.
Hoy el evento comenzará con las presentaciones de la cantante colombiana de reguetón, Karol G y la artista chilena-estadounidense de trap y reggaeton, Paloma Mami, separadas por un show de humor que estará en manos de la comediante nacional, Pamela Leiva. Desde el primer día los números musicales muestran una clara tendencia a los géneros urbanos, cinco de los seis días del evento tienen hasta dos artistas que lo representan. En términos musicales ¿será este un año decisivo para las siguientes versiones del Festival de Viña del Mar?
Parrilla completa para la edición número 62 del Festival Internacional de la Canción de Viña Del Mar.
Que se realizará desde el domingo 19 de febrero hasta viernes 24 de febrero en la Quinta Vergara. #FestivalDeViña2023 #Viña23 #ViñaDelMar pic.twitter.com/6FtNRqKEir
— Festival de Viña del Mar (@elfestival) February 15, 2023
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, críticos de música y periodistas que han seguido de cerca al Festival de la Canción indicaron no recordar una previa con tantos incidentes como los de este año. Los especialistas abordaron la evolución de la programación musical que ha tenido el certamen, así como también opinaron sobre el necesario diálogo que debe existir entre las tradiciones y la modernización del evento.
De acuerdo con el crítico de música, columnista y periodista de cultura pop en La Tercera y Culto, Marcelo Contreras, éste es un festival complejo que tiene que intentar satisfacer a distintos públicos, a diferencia de otros festivales como Lollapalooza, Primavera Sound o Fauna Primavera que son dirigidos a una audiencia determinada, mientras que el Festival de Viña puede atender desde personas de la tercera edad hasta un público muy joven.
“Además tiene el condimento del humor y una competencia de canción. Entonces, en todas esas características que debe equilibrar el festival este año parece mucho menos acertado, en la medida en que parece mucho más inclinado a satisfacer los intereses de un público mas bien juvenil”, afirmó.
A pesar de que su aparición en el certamen también fue criticada, la baja de Maná significó un gran contratiempo para los organizadores y produjo un efecto de bola de nieve cuando días previos a que comenzara el esperado encuentro, uno de los números humorísticos, Yerko Puchento, decidió dar un paso al costado para evitar las pifias del “monstruo” de la Quinta Vergara. ¿Por qué? Debido a que las artistas que reemplazaron a Maná en la noche que estaría el personaje de Daniel Alcaíno, son dos cantantes argentinas -Tini y Emilia- de pop urbano y reggaeton. Por lo que atraen a un público juvenil al que el humorista prefirió evitar, debido a su tendencia por incluir chistes machistas, racistas y hasta homofóbicos en sus rutinas.
Respecto a la baja de la banda mexicana, el crítico de música y profesor de la Universidad Católica, Ignacio Lira, reconoció que la agrupación liderada por Fher Olvera es el tipo de banda “convocante y transversal que ha alimentado por años la parrilla musical del Festival de Viña, y eso está en disminución este año”. El experto señaló que si bien el certamen incluye “clásicos” como Los Jaivas y Fito Páez, al igual que cuenta con Alejandro Fernández para los románticos y con Christina Aguilera, que es una artista pop reconocida mundialmente, “fuera de esos cuatro todo lo demás es ultra juvenil”.
“Ocho artistas de los doce están dirigidos a un público centennial que no conversa con el Festival de Viña, que no ve televisión abierta y que tienen un acercamiento con estos artistas que tiene que ver con las redes sociales”, detalló.
De esa manera, Lira sostuvo que este año se está provocando un punto de inflexión que puede significar el futuro del Festival de Viña o puede terminar de evidenciar que ciertos elementos tradicionales del evento, como la orquesta musical que se intentó eliminar, “ya no corren para esta industria o para estos lenguajes”.
El periodista nacional que por muchos años cubrió el Festival de la Canción, Toño Freire, manifestó que los organizadores de la actividad siempre han tenido que responder a la realidad artística musical que se está viviendo. “Me parece bien que le den tribuna a estos jóvenes de la expresión musical urbana, a lo mejor discrepo de si tendrán la calidad que los transforme en el tiempo en un clásico, pero sí representan lo que escucha la gente joven, es algo cultural”, opinó.
No obstante, se mostró en contra de eliminar la orquesta ya que, así como Lira, considera que es un factor fundamental de la puesta en escena que aporta al show televisivo, y “un elemento que hace que la gente vibre con la interpretación de los artistas musicales”.
El columnista de La Tercera, también mencionó que no es primera vez que el Festival tenga que lidiar con los gustos juveniles. “A fines de los años ‘70 el festival tenía que traer números de la música disco y lo hizo. Eso probablemente no agradó a las generaciones que venían de los años ‘60 escuchando música del rock and roll y qué decir de las previas que escuchaban boleros, rancheras y tango”, expuso.
En esa misma línea, el periodista explicó que el Festival de Viña del Mar puede estar experimentando un periodo de transición en el que se enfrenta a las nuevas audiencias, pero el dilema de la versión 62 es que evidentemente tiene un “excesivo énfasis” en las figuras dirigidas a las generaciones jóvenes, “pero que no necesariamente son las más rutilantes que puede ofrecer el género urbano hoy”.
Asimismo, Lira planteó que históricamente el evento le ha dado espacio tanto a reconocidos artistas mundiales, como a otros que “han tenido que repetir tres veces una canción porque era la única que el público conocía”. Por lo mismo, el crítico enfatizó que en la Quinta Vergara siempre ha habido presentaciones de personajes de renombre mundial que comparten escenario con músicos emergentes.