El fiscal nacional económico, Jorge Grunberg, presentó un informe realizado por la Fiscalía Nacional Económica (FNE) en la Comisión de Economía del Senado, el cual busca hacer más competitivo el mercado de Gas Licuado de Petróleo (GLP). Entre varias conclusiones, el estudio determinó que este mercado no funciona adecuadamente desde una perspectiva de libre competencia.

Al encuentro también estaban invitados el ministro de Economía, Fomento y Turismo, Nicolás Grau; y el ministro de Energía, Diego Pardow, quienes no asistieron a la cita. Esto generó un disgusto transversal en la comisión, por lo que se acordó que la sala enviará tanto la información pertinente a La Moneda, como un reclamo formal por la ausencia de los secretarios de Estado, dado que los parlamentarios alegaron que la materia a tratar este día era urgente y la participación del Ejecutivo era fundamental. 

El informe realizado por la Fiscalía Nacional Económica es un estudio de mercado que analizó la evolución competitiva de los mercados del gas en profundidad y de manera estructural. Las conclusiones principales del estudio son:

• El mercado no funciona adecuadamente desde una perspectiva de libre competencia.
• Existe una falta de intensidad competitiva en el segmento mayorista.
• Existen conductas comerciales que inhiben la competencia en el segmento minorista

Asimismo, respecto a las competencias entre distribuidores mayoristas (Gasco, Abastible y Lipigas), éstos se encuentran en una situación de equilibrio, lo que provoca que la intensidad competitiva del mercado sea baja y el riesgo de coordinación entre competidores es alto.

Lo último quiere decir que los mayoristas tienen una menor presión para bajar los precios al público de la que tendrían si el mercado fuese competitivo y que existen factores estructurales que afectan el nivel de competencia.

Un ejercicio econométrico realizado para los efectos del mismo informe permitió concluir que la variación de costos de las empresas de gas es asimétrica, en desmedro de los consumidores. Las tres empresas han ido aumentando sus márgenes de ganancia sin traspasar en sus precios a público la disminución de su principal costo, con la misma velocidad que sí se debería observar en un mercado competitivo. 

En palabras simples, cuando en un momento determinado las empresas de gas tuvieron que subir sus precios por la inflación, luego de que se reguló este indicador de la economía, las empresas mantuvieron el mismo precio o lo estabilizaron muy por arriba del costo que ellos como empresa estaban teniendo.

Al respecto la fiscal nacional económico, Jorge Grunberg, dio cuenta de una importante conclusión: “Los consumidores estarían pagando de manera agregada un orden de 181 millones en exceso por la falta de intensidad competitiva a propósito del gas licuado que se consume en Chile”. Así, tal cifra equivale al 15% del precio del contenido en cada cilindro de gas licuado que se consume en nuestro país.

De esa manera, la senadora y presidenta de la Comisión de Economía, Loreto Carvajal, expuso que a pesar de que este diagnóstico es el mismo que se entregó a finales de 2021 “la población sigue adquiriendo el gas a precio injusto”. Por ello, la parlamentaria del Partido por la Democracia (PPD) enfatizó que dados los antecedentes señalados, “es evidente que hay una utilidad muy manifiesta de las empresas que hoy tienen conductas monopólicas, que hoy impactan profundamente en el bolsillo de las y los chilenos“.

La legisladora manifestó que “llama la atención que esto se viene generando y que al parecer no es solo la historia de uno, dos o tres años, sino que llevamos diez años en esta situación, conducta en la que el mercado (del gas) está acaparado por tres empresas integradas, porque además los minoristas generan un cobro adicional por la entrega y la distribución en los domicilios”.

“Es decir, ahí hay también un mundo del cual no nos podemos hacer cargo, pero que tiene que ver con un valor agregado que depende justamente de la distribución de ese gas respecto a las mismas empresas y a los valores que, me imagino, las empresas les hacen cumplir”, planteó.

Carvajal también expuso que quisiera que se realicen todos los análisis y estudio necesarios para determinar si la industria del gas está efectivamente coludiéndose o no. Además, hizo un llamado al Ejecutivo a que, independiente del proyecto piloto Gas a precio justo, “deben pensarse en otras acciones que efectivamente vayan en la defensa de los consumidores, particularmente en limitar el excesivo precio que terminan pagando las personas.

En tanto, parte de las recomendaciones de la FNE para beneficiar a los consumidores de gas son:

• Prohibir que mayoristas puedan vender gas licuado a los clientes finales (directamente o con distribuidores “integrados”): distinguir claramente entre la distribución minorista y la mayorista, prohibir que los mayoristas puedan participar como minoristas en el mercado y prohibir los incentivos monetarios o no monetarios para mantener una exclusividad.
• Minoristas puedan distribuir los cilindros más baratos (competencia por precio), lo que les permitirá captar más clientes y aumentar la competencia en el mercado que llega a la ciudadanía.
• Facilitar la entrada de un nuevo distribuidor mayorista.

Revisa el estudio de mercado de la Fiscalía Nacional Económica aquí: