La filtración de una sesión secreta entre la embajadora de Estados Unidos, Bernadette Meehan, y la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados y Diputadas obligó a la mesa directiva a denunciar ante Fiscalía esta situación. Con el fin de que se investigue y se determine al responsable. El diputado Eric Aedo (DC) interpuso este jueves la acción judicial que busca esclarecer los hechos.
“Vamos a concurrir como mesa de la Cámara a la justicia”, afirmó el vicepresidente de la Cámara Baja al mediodía de esta jornada. “Nosotros no nos vamos a hacer cargo de rumores. Lo que queremos es que Fiscalía haga su trabajo. Que interrogue a quienes tenga que interrogar. No se puede dañar de esta manera la credibilidad y prestigio de la Cámara de Diputados”, señaló Aedo.
Una falta grave, fue la definición que entregaron los parlamentarios en torno a este hecho. Respecto a la relación con la embajadora estadounidense, Aedo aseguró que no han tomado contacto con ella aún pero espera que “sigan en un cauce de normalidad”. Esto, luego de que Meehan decidiera no realizar más reuniones con miembros del Congreso Nacional.
Aedo fue tajante al indicar que esta filtración “ha dañado la relación por ahora con un país socio-estratégico como Estados Unidos”.
“Si se pide una reunión secreta en el marco de la Visa Waiver y se entregan tal vez antecedentes delicados por parte de Estados Unidos y de su embajadora, entonces valía la pena que fuese secreta. Y si fue declarada secreta, lo que le correspondía a cada una de las personas que participó era obviamente no revelar lo que se había conversado”, apuntó el parlamentario, señalando además que la Comisión de Ética deberá decidir sí actuará también en este caso.
Mientras, el Secretario de la Cámara, Miguel Landeros, ratificó que la denuncia es “contra quiénes resulten responsables de la filtración” y que en caso de que se tratase de un diputado, este podría ser desaforado.
Indignación transversal ante la filtración
Diversas voces expresaron su molestia por la filtración de esta sesión secreta con la embajadora estadounidense. La presidenta de la Cámara Baja, Karol Cariola, lo tituló como una “situación de máxima gravedad”.
“No es nuestra intención que una autoridad de otro gobierno, de otro país, de otro Estado, se sienta en riesgo de participar de instancias de la Cámara de Diputados y Diputadas”, sostuvo.
Por lo anterior, Cariola llamó a resguardar y respetar las sesiones de carácter secreta en la Cámara. “De lo contrario, estamos rompiendo algo que es fundamental respecto de mantener el secreto, cuando se trata de cuestiones que pueden poner en riesgo la seguridad nacional”, enfatizó.
Quién utilizó un tono más duro para referirse a la situación fue el diputado Vlado Mirosevic (Partido Liberal), miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores.
“No solamente es poco ético, además es ilegal. Pero también compromete el prestigio de Chile a nivel internacional, porque con las relaciones exteriores no se tontea”, lanzó el legislador, remarcando que quién sea declarado como responsable deberá “responder ante la justicia”.
En tanto, el diputado de Renovación Nacional, Diego Schalper, también fue crítico sobre la materia. “Valoro y comparto la decisión que ha tomado la Secretaría General de enviar estos antecedentes a la Fiscalía. Y personalmente, como miembro de la Comisión de Seguridad, lo que más lamento, especialmente cuando hay una comisión investigadora en marcha, es que habíamos varios que queríamos invitar a la embajadora de Estados Unidos para que pudiera entregar la información que eventualmente tiene sobre el asesinato del Teniente Ojeda”, expresó.
“Este tipo de situaciones lo que hacen al final es perjudicar a ese tipo de investigaciones, a la labor parlamentaria y al prestigio del Congreso”, cerró Schalper.