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Pesar en el mundo artístico por muerte de Hugo Areválo, destacado músico y documentalista chileno

El artista documentó en imágenes a Víctor Jara, Patricio Manns, Quilapayún, Margot Loyola y Pedro Messone entre muchos otros. Además, registró la crueldad del régimen de Pinochet durante los días posteriores al golpe de Estado.

Alexis Polo González

  Lunes 27 de mayo 2024 18:51 hrs. 
Portada del disco de Hugo Areválo, El guitarrón y el canto a lo poeta. 1969.Portada del disco de Hugo Areválo, El guitarrón y el canto a lo poeta. 1969.

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Este domingo 26 de mayo falleció el destacado músico y documentalista Hugo Arévalo. La información fue dada a conocer por su compañera, la también destacada folclorista Charo Cofré. Su cuerpo fue velado en su domicilio frente al mar en Isla Negra, donde había vivido en los últimos años.

Arévalo nació en Villa Alegre en 1940, egresó en Curicó como Profesor de Estado de la escuela Normal en 1958. Fue entonces cuando se trasladó a Concepción a trabajar como periodista y guionista de Teatro, y en 1960 fue parte de la fugaz experiencia televisiva de la Universidad de Concepción.

En 1960 se trasladó a Santiago, y se incorporó a Canal 13 como camarógrafo, tras un curso que tomó en esa misma casa televisiva.

Según detalla Música Popular, Arévalo “acudió a la Peña de los Parra y tocó guitarra, un instrumento que manejaba desde niño, y con el que había sido parte de varios conjuntos musicales de proyección folklórica. Alentado por Ángel Parra, retomó su oficio musical, grabó un disco con el guitarrón chileno (como parte de la serie ‘El folklore de Chile’, del sello Odeón) y en la Peña Chile Ríe y Canta conoció a la que sería su esposa, la joven cantante Charo Cofré”.

En esa línea, el portal especializado en música chilena detalla que el integrante de la Peña de los Parra se trasladó a Glasgow en 1971 para realizar estudios de dirección y producción. En esa etapa, creó el formato de “canción filmada”, que era una canción íntegra, que él ilustraba con imágenes alusivas a ella. En realidad, la canción filmada era un videoclip, sólo que, en esos años, ese concepto aún no existía.

Arévalo trabajó en una canción filmada para La lavandera, de Violeta Parra, cantada por su esposa Charo Cofré, quien, además, fue la actriz del video que se grabó en 1970, siendo lo más cercano al primer videoclip elaborado por autores chilenos.

En 1971, Arévalo se reintegró a Canal 13 donde realizó varias series y documentales, pero en un programa multiplicó su formato de canción filmada; en Chiletcétera, invitaba músicos a tocar en vivo, pero en la semana anterior grababa con cada uno de ellos un videoclip, completando unos 20 títulos con canciones de Víctor Jara, Patricio Manns, Quilapayún, Margot Loyola y Pedro Messone entre muchos otros.

Auténticas joyas fílmicas, solo se salvaron de la llegada de los militares aquellas que el propio realizador conservó y que hoy son un valioso antecedente del videoclip en Chile, y el delicioso testimonio de una época de la música chilena. Los títulos incluyen el primer videoclip animado, del tema “Don Crispín”, del disco Tolín, tolín, tolán, de Charo Cofré”, puntualiza el portal Música Popular.

Tras el 11 de septiembre de 1973, Arévalo partió al exilio junto a su esposa a Italia. Antes de exiliarse, le mostró al mundo las atrocidades cometidas durante la dictadura de Pinochet, incluyendo imágenes de los cadáveres de hombres asesinados en el río Mapocho.

Arévalo regresó al país a mediados de los años ’80 e instaló junto a su pareja la peña La Candela en el barrio Bellavista. En 1997, su residencia se trasladó definitivamente a Isla Negra, localidad donde hoy fue sepuldado.

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