Este jueves a las siete de la mañana comenzó la huelga del sindicato de trabajadores del Aeropuerto de Santiago. La movilización ha generado preocupación entre pasajeros, a solo días del inicio de las fiestas patrias, fecha en que se espera que viajen 700 mil personas entre vuelos nacionales e internacionales.
Desde la empresa concesionaria, Nuevo Pudahuel, señalaron que la manifestación no ha preocupado mayores retrasos ni problemas y que se ha cumplido con el plan de contingencia acordado con el sindicato para que funcionen los servicios mínimos.
En ese sentido, en conversación con 24 horas, el subgerente de comunicaciones y asuntos corporativos de Nuevo Pudahuel, Manuel Valencia, detalló que quienes se están manifestando no son los trabajadores de aerolíneas ni tampoco los de servicios públicos (como la DGAC, el SAG o la PDI), sino que un total de 136 personas, dedicados a tareas como hacer las posiciones de contacto de los aviones con los puentes de embarque.
“Lo que tenemos previsto es que podamos cubrir 17 posiciones críticas con sistema de turnos durante un mes, que es lo previsto en la movilización y con eso, podamos ofrecer el servicio sin interrupciones”, dijo Valencia.
De todas maneras, desde la concesionaria se ha recomendado a los pasajeros llegar con dos horas de anticipación para el caso de vuelos nacionales y con cuatro para los internacionales. Asimismo, también instaron a realizar los checks in de manera adelantada.
Respecto a las razones que motivan esta movilización, el presidente del sindicato de trabajadores del aeropuerto, Juan Prado, explicó que las diferencias en el proceso de negociación se produjeron, sobre todo, por el monto en los bonos de colación.
“Nosotros obtenemos un bono de colación de cuatro mil 500 pesos, entonces cuando te dicen: ‘Voy a subir a cinco mil pesos’ y un plato de comida en el aeropuerto cuesta nueve mil, créeme que la gente se decepcionó con eso, porque pensaron que a lo mejor pudiera haber sido más”, afirmó Prado en diálogo con Radio y Diario Universidad de Chile.
Por otra parte, consultado sobre las posibles dificultades que se podrían generar en el aeropuerto a raíz de la huelga, el dirigente aseguró que el recinto “va a funcionar, pero no a la máquina que corresponde, pensando en la cantidad de gente que viene”.
“Si la empresa dice que puede funcionar, es porque a lo mejor va a tener que salir el gerente general a coordinar. A eso tendrían que llegar si ellos no quieren hablar con nosotros”, advirtió.