Sprinter retrata la historia de los abusos cometidos en Colonia Dignidad, en una obra universal de humanidad y redención. El montaje explora el horror en la infancia y sus alcances en la adultez, ofreciendo una experiencia que combina los códigos del cine y el teatro, la que se presentará hasta el 3 de noviembre en centro cultural Gabriela Mistral.
La actriz Daniela Contreras-López y el cineasta Edison Cájas llevan a escena la segunda parte de su “trilogía del horror”, a través de la historia de dos niños abducidos durante su estadía en una secta en el sur de Chile.
En escena, Tomás Pablo Urzúa, Patricia Cuyul, Viviana Herrera y Luz Jiménez, construyen una historia coral en la que un accidente de bus reúne a voces que indagan en un evento traumático del pasado.
A través de estas tres historias paralelas se va urdiendo la historia de una venganza que explora los límites de la realidad y la pesadilla: un chofer de bus asegura haber sido abducido mientras atraviesa el desierto de Atacama, una madre busca a su hija secuestrada, y una mujer se reencuentra con su madre después de treinta años de desaparición.
“El público se encontrará con un thriller y un viaje por 60 años en el que los personajes tienen la posibilidad de redimirse y perdonarse frente al dolor y la impunidad. El dispositivo de la obra combina tres temporalidades que se van fusionando con la historia de una abducción extraterrestre y un crimen aún no resuelto”, comentó su codirector, Edison Cájas.
“El mayor desafío de este montaje fue encontrar un lenguaje y un código atractivo que pudiese servir como puente para narrar temáticas relativas a los abusos en Colonia Dignidad. Para nosotros era muy importante encontrar la forma de relatar ciertos hechos y cómo llevarlos a cabo en escena. Una vez que encontramos el formato de thriller, pudimos encontrar, al mismo tiempo, un camino para abrir la discusión”, agregó Daniela Contreras-López.
El Núcleo Creativo CC ha abordado por años temáticas de Memoria y Derechos Humanos, investigando la represión durante la dictadura y el horror en lugares como Colonia Dignidad. Esta búsqueda derivó en el primer acercamiento a la obra, a través de BAVIERA, una apuesta digital realizada en pandemia que es la antesala de Sprinter.
“Ahí es cuando comenzamos a plantearnos el desafío de retratar estas temáticas hoy, con todas las crisis que ha tenido el país, en un lenguaje atractivo y vanguardista“, contó Contreras-López.
“Colonia Dignidad es una herida abierta de impunidad y no reparación con las decenas de víctimas chilenas y alemanas que aún esperan justicia. Por eso, los personajes de Sprinter son adultos y no niños. Para instalar la problemática en el presente, para las generaciones venideras y para un Chile del futuro”, finalizó Cájas.
Las funciones de Sprinter son de miércoles a sábado a las 20:30 horas y los domingos a las 19:30 horas. Las entradas están disponibles en www.gam.cl