El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) informó que los muestreos de verificación de Virus ISA efectuados en una jaula perteneciente al centro Arbolito, ubicado en la Macrozona 6 al norte de Aysén, en las cercanías de Melinka, cuyo titular es la empresa Southern Cross Seafood, propiedad de la firma japonesa Mitsubishi, eran positivos.
El ISA es una enfermedad viral que afecta al salmón Atlántico y está presente en Canadá, Noruega, Escocia y Chile, lo que causa la muerte de los salmones aunque hasta ahora se ha dicho que esto no afecta a las personas.
El Sernapesca explicó que el hallazgo se enmarcó en la campaña sanitaria de fiscalización porque se trata de une enfermedad con comportamiento endémico; es decir, que nunca se irá del país mientras haya centros de cultivo. Asimismo, aclaró que conforme al Programa de Vigilancia y Control de ISA, Sernapesca restringió los movimientos y está realizando inspecciones de vigilancia en el centro afectado y en el área.
El director del organismo, Juan Luis Ansoleaga, señaló que: “Estamos a la espera de nuevas mediciones para saber la dimensión de este caso, y en el intertanto hemos aislado la producción de este centro para evitar la propagación hacia otros centros contiguos. En este sentido la fiscalización está dando frutos”.
La Confederación de Trabajadores del Salmón, que agrupa a 15 sindicatos de este sector económico, comentó a través de Rosa Bahamondes, secretaria de la organización, que en la zona afectada esta vez, los centros de cultivo están muy alejados de las ciudades, lo que dificulta la fiscalización.
“En Aysén los lugares de los centros de cultivos están muy aislados de Aysén mismo, y nosotros sabemos que ellos van contaminando los fiordos y cuando esas aguas ya no sirven se van a mover a otras aguas más limpias. Para los trabajadores es un tema preocupante porque las transnacionales son subsidiadas por el Estado, la contratación de mano de obra es subsidiada. Los impuestos que estaban en esta región son bajísimos y como dice el dicho: es pan para hoy día y hambre para mañana”, explicó.
La autoridad proyecta otorgar al menos 200 nuevos permisos en las regiones de Chile Austral. Con esto, se estima que la producción en la zona casi se quintuplicaría en los próximos tres años. La razón que se adujo en su momento para ampliar el territorio es evitar estas plagas, lo que en opinión del director ejecutivo de la Fundación Parque Pumalín y Conservación Patagónica, Hernán Mladinic, no se está cumpliendo, porque se ignoran medidas básicas.
“La industria, la frontera de la industria del salmón que tenía menos de un 5% de su producción, no más de sesenta concesiones otorgadas y no más de diez centros efectivamente en operación, el Estado es irresponsable en otorgar concesiones a empresas que no han tenido un desempeño adecuado, que se han ido expandiendo bajo las mismas premisas, sin considerar aspectos básicos como la capacidad de carga, las condiciones prístinas del territorio”, declaró.
Este año, en un informe difundido por el Licenciado en Ciencias de la Universidad de Chile, Héctor Kol, se evidenció la presencia en el comercio de filetes de salmón con enfermedades como el Síndrome Rickettsial; el llamado “piojo del salmón”; y con dosis de antibióticos que superan en 36 mil veces el estándar internacional, razón por la cual recomendó no comerlo. Pero esto colisiona con el criterio económico, ya que el salmón es el quinto producto de exportación de Chile, después de cobre refinado, cobre concentrado (con roca), uva y yodo.-