Multitudes se congregaron en diversas ciudades francesas para dar homenaje a las víctimas del ataque terrorista del pasado miércoles. En total, se presume que al menos 3,7 millones de personas se manifestaron en todo el país, incluyendo a unos 50 líderes de Europa y el resto del mundo, en la más masiva marcha en la historia de Francia.

Según se constató desde diferentes medios, miles de pancartas acompañaban a los manifestantes. Las consignas de resitencia decían “Empuñen sus bolígrafos”, “Libertad, igualdad, dibujad, escribid” o “Yo soy Charlie”, por ejemplo.

Entre los líderes de otros países estaba el presidente de Malí Ibrahim Boubacar Keita, también Angela Merkel (Alemania) quien caminó tomada del brazo de François Hollande. En la misma fila se pudo ver al israelí Benjamin Netanyahu y al líder palestino Mahmud Abas, quienes no se dirigen la palabra hace más de cuatro años.

Si bien en un principio se trataba de un homenaje a las víctimas de la revista Charlie Hebdo, asesinados el pasado miércoles, la joven policía municipal el jueves y cuatro personas en el supermercado kosher el viernes. Gradualmente se convirtió en una cumbre de gran resonancia diplomática, según informan en Francia.

Agradecimientos de las autoridades

A primera hora de este domingo, el ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve agradeció la los  “otros líderes mundiales por su solidaridad (…). Hemos recibido una gran solidaridad y amistad. Esto nos da fuerza para reaccionar y combatir contra el terrorismo”.

“París es hoy la capital del mundo. Todo el país se elevará hacia lo mejor que tiene“, declaró François Hollande ante el gobierno, poco antes de iniciar la marcha.

Esta manifestación “debe demostrar el poderío y la dignidad del pueblo francés, que va a gritar su amor por la libertad y la tolerancia”, dijo Hollande.

Antes de François Hollande, sólo un mandatario francés había participado en una manifestación callejera: François Mitterrand, en 1990, después de la profanación de un cementerio judío en la localidad francesa de Carpentras.

El presidente Mitterrand junto a su ministro de Exteriores Hubert Védrine, en mayo de 1990 durante la maniifestación de protesta por la profanación del cementerio judío de Carpentraspentras.

La marcha, pensada en doble recorrido para poder canalizar la inmensa multitud, se desarrolló con total tranquilidad entre las plazas de la República y de la Nación, enclaves simbólicos del Este de la capital, a tres kilómetros de distancia el uno del otro.

Desde una sinagoga en París, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu declaró estar de acuerdo con la “posición firme” que ha mantenido Hollande en esta situación: “Nuestro enemigo común es el islam radical” y “no el islam normal”.

Además les dijo a los judíos que “tienen el derecho de vivir en seguridad donde elijan”, “en particular en Francia”, si bien enseguida reiteró que “todos los judíos y judías que deseen emigrar a Israel” serían acogidos “con los brazos abiertos”.

Movilización excepcional

En el palacio presidencial del Elíseo se congratulan de “la movilización excepcional” y de la “unión nacional”, pero subrayan también que se trata de una “manifestación del pueblo francés”

Todos los partidos estarán presentes con la excepción del Frente Nacional. Marine Le Pen, ofendida por no haber sido invitada formalmente, ha convocado una manifestación en la localidad de Beaucaire, municipalidad controlada por la extrema derecha.

Por otro lado, han sido previstas numerosas manifestaciones en grandes capitales francesas como Burdeos, Lyon o Reims. Y como ya ocurrió este sábado numerosas manifestaciones van a tener lugar en capitales extranjeras como Londres, Berlín o Washington.

Las movilizaciones masivas de este sábado en varias ciudades francesas, de las que se barajan un total de 700.000 participantes -120.000 solo en la ciudad de Tolosa-, fueron la antesala de la  histórica participación de este domingo.

Información: RFI