Es muy poco lo que se conoce de los complejos procesos denominados humedales. Según la definición, es toda superficie que este cubierta de agua, artificial o natural, estancada, permanente, que incluye los lagos, lagunas, ríos, pantanos, acuíferos o planicies.
Por ello, según algunos especialistas, antes de aprobar un proyecto, cualquiera sea, es necesario hacer el estudio de cuenca, ver el comportamiento de los distintos ríos y nacientes y las actividades productivas que se realizan alrededor, y luego definir el impacto en el entorno, lo que en la actualidad no se realiza.
A nivel internacional lo que protege los humedales es el Convenio Ramser, ratificado por Chile en 1984, cuyo proceso es a juicio de representantes de organizaciones “muy engorroso”, debido a que las autoridades locales deben hacer la postulación ante las instituciones y luego esperar la calificación.
De allí surgen las críticas de organizaciones medioambientales en contra de las instituciones del Estado, quienes denuncian que no se han entregado la debida protección a estas zonas.
La magister en Gestión y Planificación Ambiental de la Universidad de Chile, Nathalie Joignant explicó que intervienen muchos factores para tener a los humedales en una situación crítica, por ejemplo la propiedad del agua fue separada de la tenencia de la tierra, y además está comprobado que proyectos hidroeléctricos y mineros destruyen los ríos, contaminan las aguas, las nacientes y los glaciares, entre otros impactos negativos para la biodiversidad.
A juicio de la especialista en humedales falta una mayor regulación de parte de las instituciones para realizar los estudios de cuenca.
“Según este estudio de cuenca, tú vas protegiendo, se van dejando zonas donde se puede instalar una fábrica, de dónde puedes sacar agua, cuánta agua, cuánto caudal ecológico se puede dejar en un rio. Por ejemplo, en el caso del proyecto del Cajón del Maipo, se va a dejar un caudal ecológico de un 8 por ciento, muy debajo de la norma del 20 por ciento donde se mata todo el ecosistema y todos los servicios ambientales que estos ofrecen, que son más que agua, está todo lo relacionado con fibras, producción de alimentos, previsión de aguas, combustibles, recursos genéticos medicinales y regulación climática, que es una de las cosas más importantes que tienen los humedales”.
La jefa de la división de Recursos Naturales y Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, y coordinadora del Comité Nacional de Humedales, Alejandra Figueroa manifestó que según el catastro los humedales en Chile ascienden a más de 30 mil, que podrían formar parte de cursos o cuerpos de agua mayores.
Además señaló que aceptan las críticas que surgen desde las organizaciones ambientales, y se encuentran trabajando en la finalización del catastro para ponerle en una plataforma dentro de los primeros meses del presente año.
“Habrá humedales que podrán ser protegidos a través de santuarios, otros que están dentro de parques, y otros que a lo mejor ninguna figura le es propia y tenemos que generar una práctica distinta con los humedales, y eso se debe a que tenemos una cantidad importante de sectores y de servicios públicos que intervienen en las decisiones a nivel territorial”.
Según lo informado por Alejandra Figueroa la cifra podría aumentar si suman los dos millones de hectáreas de turberas, un tipo de humedal que están situados entre las regiones de Los Lagos y Magallanes.
El alcalde de Santo Domingo, Fernando Rodríguez informó que en el marco del Día Mundial de los Humedales, firmó una solicitud al Ministerio de Medio Ambiente para que el humedal Rio Maipo sea declarado sitio de importancia internacional bajo la Convención Ramsar.
En esta acción contó con el apoyo de la Universidad Católica y dos fundaciones privadas, Mar Adentro y Cosmos, estas últimas además colaboran con el diseño del humedal.
“Estos organismos nos están ayudando con la tramitación para obtener la calificación Ramsar y estamos haciendo la solicitud con el alcalde de San Antonio para poder formalizar esto, y que prontamente podamos obtener la calificación Ramsar”.
El trabajo conjunto con la Universidad Católica arrojó datos relevantes, como el catastro de cerca de 35 mil aves migratorias. Esto motivó la construcción de senderos y se mejoró las reservas de avistamiento de aves, de acceso a todo público en ese humedal.
Cabe recordar que los humedales cobraron importancia cuando se conoció la defensa que se hizo del santuario de la naturaleza del río Cruces, lugar que albergó a las colonias de cisnes de cuello negro más grande en América Latina.
Los estudios concluyeron que la empresa Celulosa Arauco y Constitución (Celco) provocó la contaminación de las aguas con metales preciosos. El impacto derivó en la muerte de las aves y en un desastre ecológico.