Donde caben 20, pueden amanecer 40. Esa es la resumida y crítica situación que hoy viven pacientes de hospitales de las comunas más pobladas de la región metropolitana.
Distintos actores vinculados al sector salud explicaron a Radio y Diario Universidad de Chile, el escenario de colapso que impera en los hospitales San José, San Juan de Dios, Sótero del Rio y Padre Hurtado de la comuna de San Ramón.
Para Gabriela Farías, Presidenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud, Fenpruss, el trastorno que aqueja al sistema es un fenómeno crónico y ha puesto en jaque la capacidad sanitaria disponible en Santiago.
“No pasa por comprar más camas en el sistema privado, más bien fortalecer el sistema público, por darle los recursos que necesitan, por tener una gestión de camas más eficientes que permita dar respuestas a las necesidades de la población. Significa más personal, más insumos, más equipamiento y camas disponibles. Eso tiene que ser una cuestión que ocurra permanentemente”, indicó.
Desde el Ministerio de Salud han explicado que la situación actual se relaciona con un segundo “peak” de enfermedades respiratorias en la capital.
Sin embargo, el académico de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, Cristián Rebolledo, descarta esa hipótesis y afirma que la situación sobrepasa cualquier periodo o crisis epidemiológica.
“Es un problema de funcionamiento de la red en general, más que hablar de prevención o promoción, me da la impresión de que no hay respuesta a las necesidades de la población en los dispositivos de atención previos a la atención hospitalaria. Entonces lo que preocupa es el funcionamiento previo de la red y en eso está la atención primaria. Ahí uno se hace la pregunta: ¿La gente pasó por el SAPU antes? O toda esta gente espera 4 o 5 horas, ¿Habrá pensado que tal vez el SAPU resolvería su problema?”, concluyó.
Sobre el tema, la diputada del Partido Comunista, Karol Cariola, recordó que hace dos meses presentó un proyecto de ley para que se reconozca al Hospital de la Universidad de Chile como una entidad del Estado, de manera que no tenga que competir por recursos fiscales con clínicas privadas.
Además, durante la discusión del presupuesto 2016, la parlamentaria presentó una glosa a la partida de Salud para que el Hospital J. J. Aguirre pueda recibir financiamiento de Fonasa por convenio directo y no por licitación, indicación que fue declarada inadmisible, pese a que previamente el Gobierno firmó un protocolo de acuerdo con la universidad en esa dirección.
“Está la recuperación del Hospital J.J. Aguirre para la salud pública, la instalación de hospitales de campaña, ya tenemos la primera experiencia en Recoleta. Por eso las medidas deben ser tomadas rápidamente a corto, mediado, pero no olvidarnos del largo plazo y que para mi gusto pasa por una reforma estructural a un modelo de salud que a todas luces no está dando abasto”, precisó.
Karol Cariola, integrante de la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, agregó finalmente que otra solución a corto plazo es la utilización de los hospitales de las fuerzas armadas y Carabineros, que se sostienen con aportes del Estado, pero que están semivacíos, porque la gente común y corriente no puede acceder a ellos.