La última Encuesta Nacional de sobre el Uso del Tiempo (ENUT), evidenció la amplia brecha entre las mujeres y los hombres en la proporción de tiempo dedicado a trabajo no remunerado. El sondeo fue realizado durante el año 2015 por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Dentro de estas labores se incluyen las actividades domésticas como el aseo, la cocina, las compras y el cuidado de niños y mascotas entre otras. Según el estudio, las mujeres destinan 5,87 horas diarias a estas actividades, mientras que los hombres 2,74. Es decir, tres horas más.
Esta tendencia es consolidada en todos los quintiles, niveles educacionales y edades estudiadas.
Mientras las mujeres continúan concentrando la mayor parte de las actividades domésticas sin remunerar, de aquellas actividades los hombres sólo encabezan las relacionadas con reparaciones menores en el hogar, en el que los varones representan el 80,7 por ciento de la tasa de participación.
Los indicadores tienden a igualarse entre hombres y mujeres en los ítem de trabajos de cuidado no remunerados, tanto de personas de 15 a 65 años, y de 66 años y más.
En cuanto a la carga global de trabajo, las mujeres trabajan en promedio dos horas más diarias que los hombres. Además, el trabajo no remunerado representa la mayor proporción en los quintiles de menores ingresos representando el 72,9 por ciento, cuando la tendencia global alcanza el 54,5 por ciento.
Además, en cuanto a los jóvenes entre 15 y 29 años que no estudian ni trabajan (denominados “NINI”), se evidenció que el 65 por ciento son mujeres y el 35 son hombres, y que son principalmente las mujeres las que se dedican a labores domésticas y de cuidado de personas. El estudio advierte que este ítem coarta las posibilidades de desarrollo laboral de la mujeres.