Durante la jornada de ayer el gobierno hacía noticia al anunciar que cambiaría el carácter terrorista de la querella interpuesta en contra de cuatro comuneros mapuches acusados de incendiar una iglesia en Padre Las Casas el año pasado.
Ante dicha situación, Alfredo Tralcal, junto a sus hijos Ariel y Benito y Pablo Trangol, habían iniciado una huelga de hambre que al día de ayer sumaba ya 117 días.
Pero hoy la situación cambió. Con la decisión del gobierno Alfredo, Benito y Pablo depusieron la huelga de hambre, aceptando la propuesta del gobierno. Sin embargo, Ariel continúa con la manifestación a la espera de que el gobierno garantice el cumplimiento de su compromiso.
De todas formas, según indicó Cristián Tralcal, vocero de los comuneros, “si el gobierno no cumple el plazo que dio, van a retomar la huelga. La fiscalìa debe hacer su trabajo, a pesar de que los fiscales están totalmente comprados por el poder empresarial acá en Temuco”.
Benito y Alfredo siguen hospitalizados y en estos momentos se encuentran recibiendo ayuda médica. Pablo también será trasladado dentro de las próximas horas para recibir apoyo de especialistas. Los comuneros están recibiendo suero y vitaminas.
Los nueve comuneros que se habían sumado hace algunos días a la huelga también optaron por deponer la manifestación.
Asimismo, durante la mañana se inició el proceso de retiro voluntario de los jóvenes que mantenían ocupada el templo de la Catedral de la ciudad.