La segunda fecha de la Copa enfrentaba a la Universidad de Chile contra el Racing Club de Argentina. El equipo azul hacía su estreno en el Estadio Nacional frente a su público con el deseo de mantener vivas las esperanzas de acceder a la siguiente ronda del torneo. Por el otro lado los argentinos se han autoproclamado como candidatos para ganar el torneo y la gran inversión económica realizada lo sustenta. Finalmente, tras un entretenido y disputado juego, el empate a un tanto terminó siendo justo con el desarrollo del partido y con las propuestas de ambos conjuntos.
La “U” salió a presionar desde el inicio y logró generar rápidamente varios errores en la defensa de Racing. Ese ímpetu inicial los llevó a abrir el marcador muy temprano. El gol de David Pizarro encendió la ilusión porque llegaba muy pronto y tras una buena jugada asociada que dejó a Yeferson Soteldo mano a mano con el arquero Juan Musso. La reacción inicial del guardavallas fue muy buena pero el rebote cayó a los pies de Pizarro que con un remate certero batió la resistencia de la visita. Entonces parecía que la tarea sería más sencilla de lo previsto y que la tempranera apertura permitiría manejar el partido sin contratiempos. Pero nada de eso ocurrió.
Racing no se venció y con convicción buscó un mejor resultado. Para ello presionó bien arriba a los defensas azules y propuso una férrea disputa en el medio terreno. Por largos momentos el juego de los argentinos fue enérgico y de alta velocidad, lo que complicó la propuesta de Ángel Guillermo Hoyos y obligó a realizar ciertos ajustes que en el torneo local no habían sido utilizados. La U cedió la iniciativa y se replegó en campo propio para recuperar conjuntamente pero eso le obligó a estar cerca de su propia portería, convirtiendo en peligro casi cualquier error en la entrega de la pelota. Y en una de esas fallas se generó el lanzamiento libre con el que Alejandro Donatti igualó el marcador. El remate fue ajustado al palo lejano del arquero pero la conformación y actuación de la barrera fue deficiente también. Tras el empate, Racing tomó confianza y tuvo momentos de nítida superioridad. Lautaro Martínez y Ricardo Centurión estuvieron muy cerca de aumentar pero el error propio, la defensa o la buena intervención de Johnny Herrera lo evitaron. Cerca del final del primer tiempo la U volvió a equilibrar el juego y crear algunas oportunidades de gol pero ya el tiempo no alcanzaría para más.
En la segunda parte, la “U” volvió al protagonismo y generó buenas opciones que fueron rechazadas por el arquero o la defensa. Intentó crear espacios por los costados y haciendo ancho el campo de juego, pudo encontrar el estilo que ha venido mostrando el equipo en los últimos partidos. Hay que remarcar que hubo un mejor funcionamiento ofensivo del costado izquierdo donde la labor de Jean Beausejour resultó más determinante que la de Matías Rodríguez quien debió dedicar más tiempo a la marca y la contención. El equilibrio en la búsqueda también es importante para no hacer predecible el juego y en ello encontramos algo que se debe mejorar.
De todas formas Racing nunca “bajó los brazos” y nuevamente luchó y revirtió la situación. El partido se volvió de ida y vuelta y las opciones de gol rondaron en ambas porterías. Después, la expulsión de Diego González, a los 22 minutos, cambió otra vez el escenario pero no los esfuerzos de la visita que durante un buen tiempo hizo que no se notara que jugaba con un hombre menos. Con el correr del tiempo y sumado al desgaste rival y al apoyo majestuoso de su publico, la U fue encontrando espacios y gracias a ellos, adelantó sus líneas. Esto le permitió mantener el balón lejos de su arco y construir con un poco más de claridad la salida desde el fondo aprovechando la superioridad numérica. Entonces parecía que el gol del triunfo azul llegaba en cualquier momento pero la impericia o el acierto de los argentinos terminaron agotando los minutos y mantuvieron inalterable el marcador.
Al final el partido resultó atractivo e intenso, con dos equipos que se turnaron el dominio del juego y donde ambos tuvieron oportunidades claras de llevarse el triunfo. Ahora los dos comparten la primera posición del grupo 5 con cuatro puntos y esperarán en esa ubicación el resultado del enfrentamiento entre Vasco da Gama y Cruzeiro. Sin duda el triunfo como local habría puesto a los azules en una posición privilegiada y por eso el empate generó un poco de molestia en los jugadores y el cuerpo técnico. Sin embargo no cabe duda de que en este partido y frente a los pergaminos y nombres del rival, la U demostró que tiene un plantel muy rico y de gran calidad que le debe permitir alcanzar instancias más importantes del torneo. Las posibilidades están intactas, el campeonato recién comienza y aún hay tiempo para encontrar una mejor versión del equipo. Eso es ahora lo fundamental.