El asteroide 21887 lleva el nombre de Dipippo. Es un reconocimiento a la contribución que ha realizado la actual directora de la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior.
De visita en Chile para participar en la Fidae, Simonetta Di Pippo reconoció que falta explicar lo importante que es el espacio en la vida diaria y cuántos satélites utiliza cada persona en sus actividades cotidianas.
“¿Qué pasará con la actividad espacial en el futuro? Si miramos al espacio, en los últimos 50 años pasó mucho y es un campo dinámico. Estamos en la segunda etapa de la era astronáutica y ahora tenemos un rol comercial del espacio” destacó la experta.
Ante la cifra de agencias en el mundo, comentó que existen solo en 12 países más la de Unión Europea. Sobre los satélites, recordó que en 2017 se contaron 200 lanzamientos. Di Pippo, quien formó parte de la Agencia Espacial Italiana, dijo que “hay un interés que va creciendo a nivel de las aplicaciones por lo que se habla de la economía espacial”.
Por esta razón, existe una “compleja discusión”: el uso pacífico del espacio y de bien común. En este escenario, la científica advirtió que la ONU tiene un rol importante.
Chile, mira aún más al cielo
En una charla magistral dictada en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, la astrofísica relató que la entidad de Naciones Unidas trabaja con nuestro país desde 2002. Se concentra en la realización de talleres y capacitación, entre ellos, en el área de desastres luego de los recientes terremotos.
“Hemos hablado sobre la importancia de crear la agencia espacial en Chile” agregó. Y explicó las razones: mayor coherencia en el área espacial, desarrollar visiones colaborativas con otros países y una mejor comunicación durante las épocas de crisis.
Simonetta Di Pippo afirmó que se necesita una estrategia mundial. La Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Exploración y Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos se reunirá en Viena durante el 20 y 21 de junio de este año. Y destacó la creación de UNISPACE + 50. “Se está mirando lo que se aprendió durante los últimos 50 años, pero también la proyección para las próximas 5 décadas” dijo.
Entre uno de esos puntos-aseguró- será que la fuerza de trabajo espacial va en alza y necesitará más estudiantes en el área de las llamadas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). “Por ejemplo, dado que estamos en la Universidad de Chile, el Objetivo de Desarrollo Sustentable número 4 tiene que ver con la educación de calidad.
La directora de la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior advirtió que otro de los objetivos del organismo internacional es “intentar cerrar las brechas entre los países que tienen capacidad de dominar las actividades espaciales y aquéllos que no cuentan con esas herramientas”.
También dio cuenta del grupo de trabajo de sustentabilidad que, a largo plazo, discute una serie de directrices en diferentes áreas. Entre ellas, la basura espacial.
“Debemos considerar que hay diferentes definiciones políticas. La basura es un problema enorme” reconoció. Considerando –ejemplificó-, que SpaceX planea lanzar numerosos satélites.
La pregunta es: ¿cómo vamos a limpiar lo que se ha dejado ahí y cómo vamos a lidiar con los desechos futuros para mitigar en este tema? “Por ahora no ha pasado nada serio (a nivel de accidentes), pero puede pasar…” concluyó.
El orgullo SUCHAI
Simonetta Di Pippo también recorrió el Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria (LEEP). El director del laboratorio, académico y responsable del proyecto SUCHAI, Marcos Díaz, le presentó las estaciones de trabajo donde se construyen los nanosatélites II y III, y describió las imágenes proyectadas en los monitores.
SUCHAI I es un gran hito del Programa Espacial de la Universidad de Chile al poner en órbita, en junio de 2017, el primer satélite desarrollado en nuestro país. La astrofísica italiana reiteró a los estudiantes “la importancia de no darse por vencido para alcanzar sus sueños”. En este caso, sueños que miran a las estrellas.
