Un nuevo escándalo al interior de las filas castrenses fue develado por el propio Comandante en Jefe del Ejército en un discurso ante 900 oficiales de la Escuela Militar. Ricardo Martínez señaló el martes, en el marco de una reunión de carácter reservado con miembros de esa rama de las FF.AA, que contaba con “información de que hay oficiales y cuadro permanente que compra armas por la vía legal, que después las dan por perdidas, pero que lo que están haciendo es venderlas a grupos de narcos, de delincuentes”.
Los audios filtrados en un artículo del periodista Mauricio Weibel y publicados por “The Clinic” no dejaron a nadie indiferente. El ministro de Defensa, Alberto Espina, expresó rápidamente que se citaría a la cabeza de la institución castrense a dar explicaciones por sus dichos y posteriormente, el propio general Martínez ofreció disculpas por la “imprudencia” de sus declaraciones a través de una conferencia de prensa en la que no aceptó preguntas de los periodistas.
En dicha oportunidad, el militar señaló que en relación a ” las denuncias que el Ejército efectuó al Segundo Juzgado Militar, el 12 y 26 de octubre, respectivamente, estas afectan a cinco cabos de una misma unidad, quienes estarían implicados en la compra de armas particulares, para luego darlas por perdidas y posteriormente, venderlas en el mercado informal, procedimiento que ha sido utilizado anteriormente por bandas de narcotraficantes y delincuentes”.
También manifestó que la situación antes descrita “no fue informada en su momento al Ministro de Defensa, ya que quedó radicada en los tribunales competentes”.
De acuerdo a informaciones extraoficiales, el asunto de la venta de armas habría salido a la luz luego de un operativo de carabineros de la Séptima Comisaría de Renca por el se habría descubierto que los suboficiales compraban pistolas, entre ellas algunas marca Glock, por precios cercanos a los $ 400 mil, y luego las venderían a delincuentes por $ 4 millones, según señala en su edición de este sábado el diario La Tercera.
Pese a que en el Ejército aseguraron que esto ya estaba en investigación, no existe información fehaciente que los suboficiales implicados en la venta ilegal de armas hayan sido separados de sus funciones. “Yo tengo que rendir cuentas a la institución, si es que es el caso, pero hasta el momento no es así” habría expresado uno de los involucrados, según consigna el mismo medio.
En tanto, la unidad del Minsiterio Público encargada de realizar las investigaciones pertinentes en esta materia es la Fiscalía Sur.