En 2015, la Corporación de Cultura y Patrimonio de la comuna de Independencia comenzó una investigación para catastrar aquellos inmuebles históricos del sector que se encontraban a la deriva respecto de la Ley de Monumentos Nacionales.
El estudio surgió en medio de un complejo debate, donde se contraponían los proyectos de modernización y edificación, con la necesidad de una protección patrimonial. Finalmente, la investigación dio como resultado el libro Arquitectura patrimonial de Independencia: una mirada histórica y urbana desde el siglo XXI, que fue publicado por editorial Ocho Libros y que podrá ser consultado desde mayo en la Biblioteca Nacional y en la red de bibliotecas públicas de la Región Metropolitana.
Esta investigación comprende 37 hitos, entre los que destacan, el Pasaje Baldomero Lillo, construido en 1928; la Población El Guanaco de Empleados Municipales, que se edificó entre 1958 y 1963 al oriente de calle Hipódromo Chile; el Castillo Santa Laura y la casona del ex Estadio Italiano.
Así, el texto se organiza de acuerdo a diferentes temas, entre ellos, conjuntos habitacionales, deportes, educación, industria, recreación teatros, arquitectura religiosa y salud.
Isidora Moulian, directora ejecutiva de la Corporación de Cultura y Patrimonio, indicó que el objetivo de este proyecto fue “explorar nuevos lugares de protección”. “Si bien no están todos los lugares, este estudio nos da un panorama. Aún nos falta mucho por avanzar, pero esta investigación nos dio luces de aquellos sectores que tienen ese potencial para ser defendidos”, indicó.
“Además, el libro fue pensado para la difusión, para que los vecinos pudieran conocer su patrimonio. No es algo tan técnico”, manifestó la gestora cultural.
La investigación fue desarrollada por Dante Figueroa, historiador y encargado de patrimonio de la Corporación de Cultura y Patrimonio de Independencia, y los arquitectos de la Universidad de Chile Alicia Campos, Patricio Duarte, Antonio Sahady y Macarena Cares. De esta manera, el ejemplar realiza una análisis histórico y arquitectónico de la comuna.
Releyendo el territorio
Para la investigadora Alicia Campos una de las conclusiones que más destaca del proceso tiene que ver con el conocimiento de los conjuntos habitacionales presentes en el sector. Esto, ya que hasta ahora, la comuna se identificaba, principalmente, con la presencia de los servicios de salud y la religiosidad evidenciada a través de sus múltiples templos.
“La discusión sobre los sectores habitacionales fue uno de los mayores descubrimientos del libro. La mayoría de los conjuntos analizados provienen de grupos de ayuda mutua, cajas de crédito hipotecario. Detrás de ello también hay un diseño determinado por las condiciones óptimas del habitar”, indicó la arquitecta.
“Estas viviendas son una gran lección, porque su diseño responde a condicionantes elementales, dignas y espaciadas. Hoy la mayoría de las concepciones van hacia la reducción de la superficie y se determinan y se priorizan en ese aspecto. Nosotros sorprendió mucho ver que había una visión mucho más humana sobre la arquitectura en estos proyectos”, apuntó la investigadora.
Según Campos, estos inmuebles se encuentran en diferentes estados de conservación, ya que existen edificaciones que se han “adaptado a sus tiempos”. Por lo mismo, la investigadora manifestó que es necesario generar una discusión respecto de su resguardo patrimonial: “Además de reconocer el valor de las edificaciones es necesario generar algún instrumento que pueda mediar estas relaciones entre modernidad y patrimonio como planes de manejo, planes de tratamiento de bordes y de sus predios”, dijo.
Patrimonio versus inmobiliarias
Esta investigación surge en un contexto de transformaciones para la comuna, sobre todo, porque en los últimos diez años han llegado nuevos proyectos inmobiliarios al sector. Según el Departamento de Obras Municipales, éstos se han visto incrementados considerablemente: si en 2003 sólo existían dos proyectos inmobiliarios, en 2013 la cifra se elevó a 39. Mientras, que en los últimos 24 meses se han presentado otros 40 anteproyectos.
Frente a ello, Dante Figueroa, historiador y encargado de patrimonio de la Corporación de Cultura y Patrimonio de Independencia, sostuvo que aún existen múltiples desafíos respecto de la protección histórica en el sector.
“El Plan Regulador de 2014 es bueno en la medida de que antes no existía uno. Además, propone cosas como bajar la altura de 23 pisos a 12, pero tampoco da cuenta de la situación de densidad de la población y lo que ello significa. Entonces, a la larga también se genera una destrucción del patrimonio”, añadió.
“Este libro trata de decir algo de eso: en Chile no hay una planificación urbana y los planos reguladores tampoco dan cuenta de cómo se pone un edificio a diez metros de un monumento. No dan cuenta de cómo se rompe esa lógica visual y arquitectónica, porque si colocas una torre de diez pisos a dos cuadras de un monumento dejas un espacio lleno de lunares. Entonces, es súper fuerte el contraste. Es como que llegaron a un límite, no pudieron avanzar, pero están ahí”, dijo.
Con esta investigación, el Municipio pretende avanzar hacia un mayor resguardo patrimonial en la zona. El objetivo, según anticipan, es discutir nuevas declaratorias así como promover una mayor valoración de los conjuntos históricos presentes en el territorio.