Una nueva polvareda se levantó en medio de la contienda presidencial. Las advertencias de Eduardo Frei acerca del recrudecimiento de los conflictos sociales con la derecha en el poder, generó duras reacciones de sus contrincantes, quienes lo acusaron de alarmista, de jugar sucio, incluso, de “pinochetizarse”.

De la campaña sucia a la campaña del terror. De esta forma se puede resumir la reacción de los candidatos presidenciales ante las palabras del abanderado de la Concertación, Eduardo Frei, quien criticó el lunes "la arrogancia de una derecha que pretende conducir el país y que nos va a llevar a conflictos sociales y a problemas", en alusión a Sebastián Piñera.

Una estrategia de ataque que los otros postulantes a La Moneda rechazaron, y se dieron maña para fustigar a Frei, calificando sus dichos como parte de la desesperación de una candidatura que aún no despierta el interés que pretende.

El aludido, el candidato de la Coalición por el Cambio Sebastián Piñera, se quejó duramente del tono de las críticas de su contendor y lo llamó a terminar con una campaña que instala un falso miedo sobre los electores.

“Yo no sé qué le pasa al senador Frei, se le nota en la cara, por qué tanta odiosidad, por qué tanta amargura, ha pasado en pocas semanas de la campaña del terror a la campaña sucia (…) ahora quiere retrotraernos a las mismas divisiones del pasado. Le digo al senador Frei: quédese con su amargura, con su campaña sucia, con su campaña del terror, porque sé que los chilenos no están ni ahí con esas campañas”.

La “Campaña del terror” es un recurso que también fue utilizado en otras elecciones claves. Una de las más recordadas es el plebiscito, en donde el propio Augusto Pinochet advertía sobre el caos que llegaría a las ciudades en el mismo momento en que el No se impusiera en las urnas.

Y justamente ese recuerdo es el que Marco Enríquez-Ominami, puso sobre la mesa para criticar a su contendor oficialista, señalando que es raro que los líderes de la Concertación se “pinocheticen”.

“Lamento el discurso del odio y del terror; lamento que ayer un candidato diga que si no gana él viene el diluvio en Chile, que fue el mismo discurso de Pinochet cuando dijo que si hay democracia vendrá el caos, qué raro que los líderes de la Concertación de la noche a la mañana se pinocheticen. No senador, acostúmbrese a la competencia".

Quien se desmarcó de un discurso crítico, pero estableció diferencias con Frei fue el abanderado del Partido Comunista y la Izquierda Cristiana, Jorge Arrate. Luego de visitar al Cardenal Arzobispo de Santiago, Francisco Javier Errázuriz, afirmó que en una sociedad en la que actualmente se viven varios conflictos sociales, con la llegada a La Moneda de un candidato como Piñera, éstos se podrían agudizar.

“Yo creo que hay conflicto social, lo que pasa es que a veces se visibiliza poco, pero en el país hay un conflicto porque las normas laborales no protegen adecuadamente a los trabajadores porque no tienen plenitud de derechos, hay conflicto social porque las desigualdades son muy grandes, hay conflicto social porque el conflicto del pueblo mapuche es también un conflicto social, político y cultural. Ahora, si va a haber más o menos en un gobierno de derecha, yo me inclino a pensar que lo más probable es que agudice”.

Sin embargo, Eduardo Frei no enfrentó las críticas de forma directa. De hecho, en una visita a un programa de televisión afirmó ser él la víctima de ataques y persecuciones y, retrucando el argumento de Piñera, adujo que le seguirá buscando errores en su trayectoria, pero no encontrarán nada.

“Respecto a las descalificaciones, llevan años escarbando en mi vida, llevo 25 años en la vida pública, lo hicieron en la campaña del 93, lo siguen haciendo ahora, resulta que nadie ha escrito libros contra mí, nunca he estado metido en un juicio, si hubieran encontrado cualquier cosa, me hubieran hecho pedazos, pero van a seguir buscando y no van a encontrar nada”.