El anuncio respecto de la cuarentena total en la Región Metropolitana, a partir de este viernes, ha generado conmoción en diversos sectores, puntos de vista que valoran una decisión quizás tardía de parte del Gobierno, pero también preocupación sobre la forma en cómo las poblaciones más vulnerables enfrentarán este nuevo confinamiento.
La comunidad migrante, por supuesto, no escapa de aquello, y el conversatorio online organizado por la Cátedra de Racismo y Migraciones Contemporáneas de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de nuestra universidad, en conjunto con la Universidad Abierta de Recoleta, moderado por el director de Radio Universidad de Chile, Patricio López, fue el escenario perfecto para profundizar en dicha temática.
Así, como representante de la organización Trama Tejido Migrante, Marymar Vargas, migrante radicada en Temuco, adelantó la forma en como se ha vivido este mismo proceso en algunas comunas de la Región de La Araucanía, particularmente desde el punto de vista de la población extranjera.
“Lo veíamos con mucho temor porque muchos de los trabajadores migrantes pertenecían, en su gran mayoría, a aquellos trabajos informales donde tenían que salir el día a día a buscar su sustento. Entonces, si había una cuarentena total no iban a poder salir. Cómo iban a sobrevivir esas personas. Desde las distintas organizaciones sociales migrantes en Temuco empezamos a trabajar de una manera solidaria”, explicó Vargas.
Sin embargo, aunque la ayuda social es de suma importancia para enfrentar esta parte de la crisis, los y las participantes de este conversatorio destacaron que son las políticas públicas las que deberían hacerse cargo de la situación de los grupos más vulnerables.
Esto, a su vez, según el integrante del Movimiento Acción Migrante, Eduardo Cardoza, contrasta paradójicamente con la intención del Gobierno de apresurar la aprobación de la Ley de Migraciones, haciendo uso de mecanismos comunicacionales que acrecientan aún más las brechas y barreras sociales.
Asimismo, Cardoza se pronunció respecto de la necesidad de una regularización que permita a la comunidad migrante enfrentar la crisis en igualdad de condiciones.
“Es súper necesario que se regularice a todo el mundo, que se les dé un documento de identidad a todas las personas que están en situación de irregularidad para que incluso puedan pedir en esta etapa de cuarentena total puedan pedir hasta un permiso para ir al supermercado. En ese sentido es necesario también seguir como lo están haciendo las organizaciones migrantes, trabajando juntos”, resaltó.
A las voces de las organizaciones migrantes; sin embargo, los pronunciamientos y acciones desde la academia han sido imprescindibles para visibilizar diversas falencias de la sociedad al momento de enfrentar este tema, y en donde la palabra “racismo” aparece también como una arista no menor en medio de la pandemia.
Al respecto, la coodinadora de la Cátedra de Racismo y Migraciones Contemporáneas de la Universidad de Chile, María Emilia Tijoux, aunque en diversas oportunidades ha manifestado la importancia del trabajo migrante como sostén de las ciudades confinadas, reflexionó sobre la estigmatización laboral hacia los migrantes, reforzada también por una serie de recursos mediáticos.
“Hay un racismo específico laboral que está demás colocado o dividido por nacionalidades. Eso me lleva a pensar en qué lugar se coloca a colombianos y colombianas, por ejemplo, en cuál es la figura que hemos obtenido vinculada con el trabajo de mujeres y hombres colombianos a partir de toda una producción entre las series colombianas y chilenas, y un imaginario completamente equívoco”, comentó la académica.
Además, como representante del mundo político, el alcalde de la comuna de Recoleta, Daniel Jadue, también acotó su punto de vista en este conversatorio, y aunque resaltó las políticas llevadas a cabo en su comuna respecto de la atención pública, indiferente de aspectos como el estatus migratorio de las y los habitantes, precisó que las municipalidades, durante esta crisis, han visto disminuidos sus recursos destinados a reforzar estas prácticas.
“Los municipios perdieron 900 mil millones de pesos y eso va directamente a golpear la plata que nosotros ocupábamos para inversión y ayuda social. Estamos viviendo un proceso sumamente complejo y esto golpea a todos y particularmente, en esta comuna, golpea en la zona sur, a todas aquellas personas, también migrantes, que viven híper hacinados en estos arriendos absolutamente inescrupulosos”, manifestó.
Cabe resaltar, además, que el espacio de conversación mencionado sirvió para enfatizar la incidencia que en la actualidad tiene el racismo, desde las políticas públicas hasta lo más cotidiano, pasado también por lo mediático. Este problema, según se pudo constatar en las opiniones de los y las participantes, es capaz de condenar a la persona a una precariedad en distintos ámbitos de su vida.
Así también, la académica María Emilia Tijoux enfatizó el rol que Diario y Radio Universidad de Chile ha jugado en favor de la comunidad migrante en el país, y que se hace urgente sobre todo en medio de la tan criticada concentración de medios, y que, como se ha comprobado en diversas coberturas, continúa perpetuando las lógicas del racismo que el periodismo no debiese tolerar.