Este domingo murió a los 94 años de edad el cardenal Jorge Medina Estévez en la ciudad de Santiago.
Obispo de Rancagua y Valparaíso, además fue el protodiácono encargado de anunciar el nombre de Joseph Ratzinger para suceder a Juan Pablo II al frente de la Iglesia de Roma. Durante el papado de Benedicto XVI, Jorge Medina fue enviado de en varias misiones a nombre del Vaticano.
Su misión pastoral estuvo vinculada muy de cerca a la contingencia donde públicamente expresaba las opiniones en su condición de religioso en contra de materias como el matrimonio igualitario, el uso de métodos anticonceptivos, así como otras políticas públicas que se discutían en la sociedad chilena.
“Muchas de estas situaciones se podrían arreglar con contratos, un contrato social, un contrato de comunidad, un testamento, un mandato. No hay necesidad de hacer esta ley”, sostuvo en entrevista con CNN al expresar su oposición al matrimonio civil de personas del mismo sexo.
“La tradición de la Iglesia ha declarado siempre que los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados y no pueden recibir aprobación en ningún caso”, abundó entonces.
Sin embargo, Medina es apuntado por uno de los cientos de víctimas de abusos sexuales por parte de curas dentro de las parroquias e iglesias a lo largo del país.
En 2018, el ex seminarista Sebastián del Río contó que la violación que sufrió a manos del cura Gonzalo Duarte, la denunció ante el propio cardenal Medina quien era obispo de Valparaíso.
“Yo tengo certeza que mi denuncia fue recibida por el Papa Benedicto XVI. Le pidió al cardenal Jorge Medina que me entrevistara y no pasó más. Mi impresión es que quería proteger a Gonzalo Duarte”, indicó en esa entrevista con Radio Biobío el ex seminarista.
Teóloga María Baldrich: “Me hizo la vida imposible”
El carácter inquisidor de Jorge Medina quedará en la memoria no sólo de quienes lo vieron como un opinador de temas sociales, a pesar de que en Chile el carácter laico del Estado fue establecido en los albores de la República.
Así queda de manifiesto en la entrevista realizada por la periodista Alejandra Matus para el semanario The Clinic a la teóloga María Clemencia Baldrich, quien a pesar de haber nacido en una familia cercana a la institución religiosa, fue perseguida por Medina según cuenta en su relato.
Baldrich comenta que estudió en el colegio Universitario Inglés de las Esclavas del Sagrado Corazón y su familia tenía vínculos cercanos con algunos curas como monseñor Sergio Valech, quienes le ayudaron a conseguir los documentos que le pidió Medina en un intento por impedir que ingresara a estudiar teología a la Universidad Católica donde era el decano.
Pero Bladrich no dio su brazo a torcer y superó incluso las expresiones misóginas que sostiene fueron expresadas por Medina y estudió junto a unos 40 seminaristas gracias a una autorización expresa enviada desde el Vaticano.
“Nunca quiso que yo llegara al final, y que obtuviera los títulos. Como es misógino, nunca pudo aceptar que una mujer le hubiera doblado la mano. Me ponía cortapisa tras cortapisa. Yo creo firmemente que su plan oscuro era sacarme de la Facultad por cansancio. Era como un reto personal. Pero se encontró con una más porfiada que él y no lo logró”, relata en la entrevista con Matus donde cuenta detalles de los abusos de poder de Medina con los que buscó truncar su deseo de seguir el camino de la teología.
Los restos de Medina están siendo velados en la parroquia La Transfiguración del Señor ubicada en la comuna de Las Condes y su misa funeral se realizará este lunes a las 14 horas en la Catedral Metropolitana.