Las cifras aumentan a medida que pasan los días, más rápidamente las de los hospitalizados que las de los muertos. Oficialmente hay 734 víctimas mortales pero la cifra puede aumentar aún mucho más.
En el Alto Artibone, zona más afectada por el cólera, donde se inició la epidemia, las organizaciones humanitarias, la Minustah, así como el propio Gobierno coinciden en que necesitan 1.200 sacos mortuorios, según un informe oficial. Además piden más ayuda y más material hospitalario para atender a los enfermos.
Según las estadísticas disponibles en el sitio web del ministerio de Salud, en el departamento de Artibone han muerto 497 personas desde que apareció la enfermedad.
Todo indica que la epidemia no está remitiendo y que se teme que si ahora ya muchos hospitales están desbordados, la situación se vuelva insostenible. Es el caso también en los barrios marginales de Puerto Príncipe como la Cité Soleil, donde los centros ya no pueden más.
Cada día está llegando más gente enferma, una situación agravada por el paso del ciclón Tomas que inundó muchas zonas. En total, 11.125 personas han sido hospitalizadas.
“Hemos recibido a muchos enfermos estos últimos días en el hospital público de la capital, si esto continúa así, a este ritmo estaremos muy rápidamente desbordados”, dijo el docteur Yves Flambert, jefe de enfermedades infecciosas del hospital.
En Puerto Príncipe viven 3 millones de personas, un millón de las cuales se hacinan en los campamentos temporales donde encontraron refugio tras el terremoto de enero pasado.