Mientras el mandatario ha militarizado Caracas, el dirigente opositor insiste en su victoria en gira continental. Maduro pretende sostener el poder crecientemente aislado: los presidentes de México, Brasil y Colombia no irán al acto de posesión.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana ha puesto en marcha un plan de seguridad a una semana de la toma de posesión presidencial. Más de 1.200 efectivos militares se desplegarán en la ciudad de Caracas.
La presidenta de Evópoli sostuvo que mantendrán el caso del secuestro del exmilitar venezolanos en “planos separados”, puesto que “sería muy irresponsable empezar a sembrar sospechas de cosas que no tenemos ningún sustento”.
Radio y Diario de la Universidad de Chile conversó con los nacionales que participaron en el encuentro, donde acudieron más de 700 delegados de izquierda de todo el mundo. Preservar la paz en Venezuela y la región ante una posible escalada bélica de Estados Unidos, fue una de las principales resoluciones, pero no la única.