Durante las primeras semanas de funcionamiento del grupo de Carabineros entrenado en Colombia, los hechos de violencia en la Araucanía no han disminuido, si no por el contrario, han aumentado. Mientras que para el gobierno se requiere tiempo para ver resultados, para actores vinculados en la zona, la medida no ayudará a la paz y solo generará más conflictos.
La capacitación de funcionarios del GOPE con la policía colombiana es, en ojos del werkén, un “desahucio” del diálogo. A su juicio las realidades colombiana y chilena son diametralmente opuestas y nada justificaría un entrenamiento en tierras cafeteras para enfrentar el conflicto con el pueblo mapuche.