Biddy Forstall, testigo precoz del ocaso del salitre, narra un momento de nuestra historia y de una zona de indudable gravitación en el destino de nuestro país, a través de los recuerdos de una mujer que, a sus 85 años de edad, decide compartir sus vivencias y las de sus familiares sobre ese desaparecido mundo de la pampa del Tamarugal.