Nuestro medio conversó con la directora Celeste Rojas Mugica, quien reveló la génesis de la película centrada en su padre: un hombre forzado a vivir en la clandestinidad que pone sus dotes como fotógrafo al servicio de la causa política.
Pese a que celebró la iniciativa del Gobierno, que podría significar la entrega de un presupuesto permanente al festival, Camargo enfatizó en que también es necesario aumentarlos, para que el certamen realmente tenga carácter internacional.
En la ceremonia estuvo presente la ministra Carolina Arredondo, quien reiteró el compromiso del Gobierno de entregar recursos permanentes al Centro Cultural de Promoción Cinematográfica de Valdivia, organismo encargado de la producción del festival.
El festival se realizará entre el 11 y el 17 de octubre en modalidad híbrida, es decir, con exhibiciones presenciales y virtuales.
El certamen dio a conocer las obras que marcarán la apertura y el cierre del evento programado para octubre. Se trata de cuatro piezas que, de una u otra manera, han estado relacionadas al festival, entre ellas, Los huesos de Cristóbal León y Joaquín Cociña, y Alicia soñó con un faro de José Luis Torres Leiva.
Con una intimidad inusual, la película explora las consecuencias de abuso sexual sistematizado, palizas colectivas y experimentos médicos del seguir viviendo en un lugar que fuese centro de tortura y desaparición de prisioneros políticos.