Según la Confederación General del Trabajo (CGT) 2.3 millones de trabajadores se movilizaron en Francia, 550 mil de ellos en Paris. El Ministerio del Interior copó las calles con 12 mil policías en todo el país, 5 mil tan sólo en la ciudad luz.
La alocución televisiva del presidente en la que defendió su “necesaria” reforma del sistema de pensiones fue acompañada a través de Francia por conciertos de cacerolas y cuestionamientos de sindicatos y dirigentes opositores.
Con un 58% de los votos, Emmanuel Macron, seguirá siendo el representante francés que promete la consolidación de la Unión Europea y garantiza el diálogo con los Estados de Latinoamérica.
Macron, fue reelegido con el 58,8% de los votos, frente a Marine Le Pen, que pese a perder logró el mejor resultado de la extrema derecha en una elección presidencial en el país (41,2%).
Francia entró este sábado en su jornada de reflexión antes de decidir si reelige al centrista Emmanuel Macron en la presidencia o lo cambia por su rival ultraderechista Marine Le Pen, una elección crucial seguida de cerca a nivel mundial.
El mandatario galo que busca la reelección esperaba superar a la candidata derechista con holgura en la votación que se registrará este domingo. Pero los pronósticos hablan de una diferencia de sólo 3% con una alta abstención de los electores.
La gran nación de la libertad, la igualdad y la fraternidad vive días de desasosiego, en medio de un panorama político revuelto y que, según las encuestas, tiende a una clara derechización del electorado francés. El último de estos sondeos, realizado por Ifop para Le Journal du Dimanche y Sud-Radio y publicado el pasado domingo, sitúa a Macron a la cabeza de las preferencias con un 25% de los votos, seguido de Marine Le Pen (en torno al 19%) y de Eric Zemmour, que obtendría entre el 14 y el 15% de los votos.
Con más de 20 millones de votos a su favor, 66% de los votos, Emmanuel Macron obtiene el segundo mejor resultado desde 1958, tras el 82% conseguido por Chirac en 2002. Pero la victoria del 7 de mayo no resuelve los principales desafíos que ahora debe enfrentar el nuevo mandatario.
La crisis económica, la inmigración como una amenaza y la parálisis ideológica del socialismo acarrean agua al molino de la extrema derecha, del mismo modo que el brutal atentado contra Charlie Hebdo.
El partido de ultraderecha francés se impuso en forma inédita en las elecciones europeas de este domingo. Un 25% que lo instala como el primer partido de Francia, desplazando al socialismo de Hollande a una tercera posición.