Ejerció la docencia, dirigió talleres literarios, participó como jurado en diversos concursos y en 2001 presidió el del Premio Municipal de Literatura de Santiago. Autora de novelas y cuentos, Marta Blanco siempre ejerció un estilo directo. “En Chile es feo pensar. Es de mal gusto hacerlo y mucha gente no ejerce el pensamiento”, aseguraba.