El 20 de diciembre de 1944 el investigador chileno, Tomás Lago, dio el discurso inaugural de lo que era su sueño: dirigir un museo que valorara el arte popular. Su gestión, más el aporte de importantes actores culturales, levantaron el primer recinto con estas características en la región. Hoy, a 70 años de aquel episodio, el Museo de Arte Popular Americano de la Universidad de Chile proyecta dejar el nomadismo que ha vivido desde sus inicios e incrementar su colección.