Las recientes crisis que vivieron los elencos de Antofagasta y el Maule evidenciaron las dificultades que las agrupaciones de música clásica tienen para subsistir lejos de Santiago.
El director sueco, que fue anunciado como titular de la Sinfónica de Concepción y luego no ocupó el cargo, acude a tribunales para pedir una millonaria indemnización. “Rompieron el contrato, algo único en el mundo de las orquestas sinfónicas”, afirma.
La agrupación decidió no presentarse en conciertos ni ensayos hasta que los ejecutivos de la Corporación Cultural de la que dependen sean removidos de sus cargos.
La crisis en la corporación que administra a la Sinfónica de Concepción no se detiene: esta semana renunció el director del Coro UDEC y los músicos comenzaron los ensayos sin saber realmente qué ocurrirá durante la temporada. Mientras, los tribunales siguen dándole la razón a los artistas.
Dos músicos acaban de ganar un juicio por despido injustificado, el último concertino irá a tribunales por lo mismo y el director que había sido designado titular para este año dice que rompieron su contrato. Además, dos cantantes del Coro fueron expulsados por manifestarse contra la corporación que administra a ambas agrupaciones. Una historia de tribunales, malos tratos, prácticas antisindicales y poca, muy poca música.
El grupo toca este sábado junto a la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Concepción, con la cual grabó nuevas versiones para algunas de sus canciones. “Siempre hemos pololeando con otras artes”, dicen.
La banda se unió a la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Concepción para reversionar sus propios temas y lanzará el álbum el próximo 25 de enero.
El próximo 12 de diciembre, en el Movistar Arena, la banda actuará junto a la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Concepción y el Coro Profesional del Teatro Municipal.