El Scottish National Party (SNP) está acusando el golpe sufrido con la detención de la ex primera ministra Nicola Sturgeon y, según una encuesta publicada por el Sunday Times, el opositor Labour Party ya lo adelanta cara a las elecciones generales.
El Partido Laborista se impuso en la votación con cerca del 50% de los sufragios, un “excepcional resultado” reconocido inmediatamente por la oposición.
Este martes es la fecha límite para inscribirse para votar en las elecciones legislativas del 12 de diciembre. Hace tan solo unos días, unos nueve millones de británicos todavía no estaban registrados. Partidos, organizaciones y ciudadanos se movilizan para que nadie quede atrás en estos comicios decisivos.
La perspectiva del Brexit ha puesto al mundo político británico patas arriba. A las desavenencias entre los conservadores de la primera ministra Theresa May le siguieron las divisiones entre los laboristas. Su líder, Jeremy Corbyn, acaba de salir de la ambigüedad que lo caracteriza y tras la dimisión de varios diputados de su partido y a sólo un mes del divorcio con los europeos, aboga por un segundo referendo.
Un grupo de diputados del Partido Laborista británico anunciaron el lunes que dejan la principal fuerza de oposición en Reino Unido por su desacuerdo con su gestión del dosier del Brexit y las reiteradas acusaciones de comportamientos antisemitas.