Expertos en educación aseguran que no existen grandes diferencias entre los textos escolares que entrega el ministerio de Educación y los que venden las editoriales. A pesar de esto, los ejemplares de marca cuestan entre 10 a 20 veces más y en algunos colegios se obliga a comprarlos. Éstas son las críticas de los especialistas en torno al negocio de los libros, además de una posible solución vinculada con las nuevas herramientas tecnológicas.